En el minuto 32 de la primera mitad, el partido de la Eurocopa entre Alemania y Dinamarca tuvo que ser detenido por una fuerte tormenta eléctrica que azotaba en las inmediaciones del estadio Signal Iduna Park.
Al ver los fuertes rayos que caían muy cerca del inmueble. El árbitro central tomó la decisión, pidiéndoles a los jugadores que salieran de la cancha. Después de pasar unos minutos en las bancas, los futbolistas fueron a resguardarse en los vestidores.
El partido se mantenía cero por cero brindando un encuentro muy parejo ante un estadio repleto digno de una justa continental.
Además de la fuerte tormenta, la fuerte lluvia y el granizo se hizo presente en el terreno de juego regalando postales para enmarcar en el estadio del Borussia Dortmund.
Por fortuna para los espectadores, el partido solo duró detenido 20 minutos por las inclemencias del tiempo.
El encuentro se reanudó jugando 13 minutos restantes de la primera parte, para después irse al medio tiempo y jugar con normalidad los 45 minutos restantes.
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