Este jueves 19 de septiembre, la escuadra del Feyenoord comandada por Santiago Giménez, inició su andar en la Champions League ante el Bayer Leverkusen. Lamentablemente, para los de Róterdam el inicio fue con el pie izquierdo, recibiendo cuatro goles y siendo el último de ellos un escandaloso autogol del portero, Timon Wellenreuther.
Luego de que en Florian Wirtz abriera el marcador del partido al 5′, apareció en el encuentro Alejandro Grimaldo al 30′, para complementar y aumentar la ventaja a un contundente 2-0. Unos minutos después, al 36′, Wirtz volvió a hacer vibrar el estadio con su doblete en el partido que hundió las aspiraciones de los locales.
Por si no fuera poco, previo al término de la primera parte, un tiro libre en tres cuartos de cancha desde sector izquierdo cruzó el área y fue rematado por Edmond Tapsoba al 44′. La bola llegó sin mucha potencia a la posición del guardameta Timon Wellenreuther, quien cometió un terrible error mandando la pelota al fondo y con un autogol llevar el marcador al 4-0.
¿Qué pasó en el resto del partido?
Al regreso del descanso, la intensidad de las Aspirinas se mantuvo poniendo en muchas complicaciones al Club del Mosa; sin embargo, estos supieron responder de gran manera en la defensiva, pero sin mover el electrónico a su favor
Asimismo, podemos señalar que el cuadro de Rotterdam llegó a marcar dos goles en el encuentro, pero estos fueron invalidados por posición en fuera de lugar, dejándolos sin posibilidades de recortar distancias. El primero de ellos se le arrebató a Ramiz Zerrouki al 9′, y significaba la igualada por la mínima, el segundo fue al 73′, siendo Ayase Ueda el autor del tanto.
