Un nuevo episodio de violencia azota las acanchas de futbol. En recientes horas, Alajuelense y Herediano disputaron la gran final del Torneo Apertura en la Primera División del futbol de Costa Rica, arrojando como gran campeón al cuadro rojiamarillo por marcador de 2-3; sin embargo, el título 30 del huracán no trajo solamente festejos, sino también una pelea campal insólita.
En la cancha del Estadio Alejandro Morera Soto fue donde las acciones del partido arrojaron como protagonistas a Celso Borges al 4′, Diego Campos al 47′ y Allan Cruz Al 69′, por ser los anotadores del encuentro. Posterior al silbatazo final, la corona para el Herediano tuvo que esperar, ya que se desató una pelea en la zona de bancas que provocó el ingreso de los elementos de seguridad y algunos aficionados armados.
¿Cuál fue el accionar que provocó la pelea en la gran final?
De acuerdo con los reportes, fuera de las cámaras un miembro del equipo de Herediano se acercó a la grada para recibir una bandera del equipo e iniciar con su celebración, pero de forma sorpresiva una persona del cuerpo técnico de Alajuelense se acercó para arrebatarle el objeto e iniciar una discusión acalorada.
Como era de esperarse, los compañeros de ambos implicados vieron el conflicto y corrieron a intentar calmar la situación, aunque por el momento y las emociones recientes esto fue imposible comenzando con empujones.
La policía del inmueble corrió para detener el suceso, pero para ese momento los jugadores ya habían intercambiado golpes e incluso desde las gradas ya habían comenzado a llover objetos. Sorpresivamente, las cámaras de televisión también lograron captar el momento en el que los hinchas derrumbaron las vallas de seguridad y uno de ellos ingresó al campo con un tubo dispuesto a golpear.
A los minutos la policía mandó los jugadores a vestidores, donde los jugadores del Herediano tuvieron una premiación insólita.
