La gran batalla por tener la atención de los más de 120 millones de espectadores que se espera sintonicen el evento deportivo más importante del año, el Super Bowl LIX ya inició; más allá de la acción del partido y el espectáculo del medio tiempo, hay otra competencia que llama la atención: la de los anuncios publicitarios.
¿Cuánto cuestan 30 segundos de publicidad en el Super Bowl 2025?
Cada año, las marcas más importantes del mundo están dispuestas a desembolsar cifras millonarias para aparecer en la pantalla durante los codiciados espacios publicitarios del Super Bowl; según informes recientes, algunos anunciantes pagaron hasta 8 millones de dólares por un anuncio de 30 segundos, lo que superó con creces los precios del año pasado.
“Lo que fue único en este Super Bowl, o este mercado, fue que teníamos mucha más gente que no estaba en el juego en absoluto, y de repente dijo, no, no, tengo que entrar al juego”, dijo Mark Evans, vicepresidente ejecutivo de ventas de anuncios de Fox Sports.
La demanda de espacios publicitarios fue tan alta que Fox, la cadena encargada de transmitir el evento este año, informó en noviembre que ya había vendido todos los espacios disponibles, a lo que calificó como un “precio récord”.
A medida que los espacios disminuían, el precio aumentaba, según los informes, los anuncios del Super Bowl normalmente aumentan alrededor de 100 mil dólares cada año, pero este año, se informó que el aumento fue más cercano a los 500 mil.
Fox se negó a hacer comentarios sobre el precio específico de 30 segundos. El año pasado, un anuncio de 30 segundos se vendió por alrededor de $7 millones.
¿Por qué los anuncios del Super Bowl son tan caros?
El Super Bowl es el evento televisivo más visto del año en Estados Unidos, con una audiencia masiva y un público diverso que por lo general rebasa los 100 millones espectadores, los anunciantes ven el Super Bowl como una oportunidad única para promocionar sus productos y llegar a millones de consumidores.
Además, los anuncios del Super Bowl se convirtieron en un fenómeno cultural en sí mismos; muchas marcas invierten grandes sumas de dinero en la producción de anuncios creativos y memorables que se convierten en tema de conversación durante semanas e incluso meses después del evento.