El primer día de actividades en el Gran Premio de Arabia Saudita 2025 de la Fórmula 1 se vio empañado por un espectacular y preocupante accidente protagonizado por el piloto de Red Bull, Yuki Tsunoda.
¿Cómo fuel el duro accidente de Yuki Tsunoda en el GP de Arabia Saudita?
Cuando restaban pocos minutos para el final de la segunda sesión de prácticas libres, el joven japonés perdió el control de su RB21 al abordar la curva final del veloz y demandante circuito callejero de Jeddah.
El monoplaza de Tsunoda impactó con violencia contra el muro exterior de la última curva, provocando una bandera roja que interrumpió la sesión y generó una visible tensión en el pit lane.
Las imágenes del coche destrozado evidenciaban la magnitud del impacto, con daños considerables en la parte delantera, especialmente en la suspensión delantera izquierda.
A pesar de lo aparatoso del choque, la buena noticia llegó rápidamente a través de la radio del equipo: Yuki Tsunoda se encontraba bien y pudo salir por sus propios medios del maltrecho monoplaza.
El alivio por la integridad física del piloto contrastaba con la ardua tarea que ahora enfrentan los mecánicos de Red Bull, el equipo tendrá una noche larga por delante para evaluar y reparar los daños significativos sufridos por el RB21, con el objetivo de tener el coche listo para la crucial sesión de clasificación del sábado.
El propio Tsunoda se disculpó con su equipo a través de la radio, admitiendo su error en la maniobra que desencadenó el accidente: “Simplemente giré demasiado y toqué el muro interior, lo que provocó daños. Después de eso, no tuve control. Disculpas al equipo, el ritmo estaba siendo bueno, así que es una lástima”, explicó el piloto japonés tras el incidente.
Este brutal choque subraya una vez más los riesgos inherentes a la Fórmula 1 y la exigencia extrema del circuito de Yeda, conocido por sus altas velocidades y sus estrechos márgenes.