En la segunda temporada de “Sex Education” pudimos ver la llegada de nuevos personajes que se sumaron a la trama de la serie, uno de ellos fue George Robinson, el actor que le dio vida a “Isaac”, el eterno enamorado de “Maeve” (Emma Mackey).
Realmente su participación no es recordada por los fanáticos con mucha simpatía, ya que fue él quien borró el mensaje de amor que “Otis” (Asa Butterfield) le envió a “Maeve” y que pudo haber cambiado el final de la segunda parte de la serie.
Sin embargo, en la tercera temporada los productores profundizaron más en el personaje y en el importante mensaje que transmite a lo largo de su aparición.
Desde su estreno, “Sex Education” se ha ganado el reconocimiento del público al retratar temas bastante actuales a los que no se le da la suficiente importancia. Además de mostrar una pequeña porción de lo que vive la comunidad LGBT+ en África, también incorporaron en el proyecto a una persona con discapacidad, quien fue George Robinson.
“Todo el mundo conoce a alguien que tiene una discapacidad y, sin embargo, [esto no se refleja] en los medios…Es verdad que está cambiando. Ha habido un precedente en el pasado de tener personajes en sillas de ruedas que no son interpretados por personas en sillas de ruedas”, reveló Robinson.
A los 17 años George sufrió una lesión en la médula espinal durante una gira de rugby en Sudáfrica en su época escolar. “Sufrí una fractura cervical de nivel C4/C5. Eso significa que no tengo movilidad por debajo de donde sufrí la lesión, ni puedo usar mis brazos o manos”, comentó a Back Up Trust, una organización benéfica del Reino Unido que apoya a las personas afectadas por lesiones de la médula espinal.
El actor segura que aunque muchos lo van imposible, se puede llegar a tener una vida bastante independiente.
“Una vez que tienes la infraestructura adecuada, vivir de manera independiente con una lesión de médula espinal puede ser bastante simple. Tengo un asistente personal que me ayuda a cocinar, levantarme por las mañanas y hacer cosas en casa. También uso una silla eléctrica. La mía esencialmente es una silla de ruedas manual que se ha equipado retroactivamente con ruedas eléctricas. Es fantástica, es realmente liviana y me ayuda a moverme libremente”, dijo el actor de 24 años.
Aunque siempre sintió afinidad con la actuación, luego del accidente dudó si seguir intentándolo. “No estaba seguro si quería presentarme como actor. Pero me reevalué a mí mismo y me di cuenta de que necesitaba salir de nuevo como actor discapacitado”, añadió.
Al actor siempre lo llenó ver la conexión que se logra entre los estudiantes de teatro. Así que decidió volver al entorno que realmente lo hace feliz.
“Actuar es algo que siempre he disfrutado hacer. La razón principal por la que comencé fue porque me encanta el ambiente de colaboración. Entras en un aula de teatro y es diferente a cualquier otra clase. Trabajas con tus compañeros y te ríes. Me di cuenta de que incluso después de mi lesión, todavía quería ser parte de esa atmósfera. Desde entonces, todo se intensificó y ahora estoy en esta serie de Netflix”, dijo.
Esa es la conmovedora historia detrás del papel de “Isaac” que se ha ganado el respeto y el cariño de la audiencia. A lo largo de las dos temporadas se puede ver como George interpreta a un personaje que es feliz con quien es.
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