“La desalmada” vivió uno de sus capítulos más emocionantes. Ahora que se acerca a su capítulo final, el melodrama sumó más suspenso y tensión entre los personajes, especialmente en “Rigoberto”, quien ya no puede callar más el amor que siente por “Isabela”.
La exprometida de Rafael Toscano (José Ron) le ha hecho creer a todos que el hijo que espera es un verdadero Toscano, todo con la idea de tener estatus social y recuperar el amor que ahora le pertenece a Fernanda Linares. Pero sus planes quedaron al descubierto cuando Rigoberto, con quien vive un amor clandestino, contó todo a su mejor amigo.
“Chula, después de esta noche vamos a tener mucho dinero, así que empaca lo necesario porque esta noche nos fugamos para nunca volver”, le pidió a Isabela con la esperanza de vivir con ella y su hijo lejos de Ichámal. Pero ella no cederá a sus planes y rechazó la idea: “¿Estás loco? No me voy, yo me quedo aquí hasta que Octavio me de las escrituras de los Laureles, ni creas que me voy a ir a vivir a un rancho de tres pesos”.
Rigoberto se ofuscó y alterado comenzó a discutir con Isabela, reclamandole por haberlo engañado y ponerle más pretextos para no irse con él. Es verdad que te amo Beto, pero yo no puedo vivir sin lujos y eso tu siempre lo has sabido”. El peón le repitió que fue engañado y que solo quiso embarazarse para quedarse en El Primor y estar cerca de Rafael.
“Es la única manera de que los Toscano me den todo lo que tu no puedes”, le gritó Isabela quien ha llevado sus planes al límite. Beto no quiso ceder y entre lágrimas le dijo no estar dispuesto a seguir visitándola a escondidas. “Todos estos meses me has estado usando pero ahora mismo le voy a contar todo a Rafael”.
Entre los gritos de Isabela, Rigoberto encaró a Rafael para revelar el gran secreto que ha guardado desde siempre. “Te estaba buscando. Aunque me mates ahora mismo ahora mismo te vas a enterar de todo. Desde hace mucho tiempo te he estado engañando y he sido un estúpido, pero todo lo que he hecho ha sido por amor”, exclamó el peón.
El capítulo 77 de “La desalmada” alcanzó su máxima tensión cuando Beto exclamó: “El hijo de Isabela es mío, Ella y yo hace mucho tiempo te hemos estado engañando”. Isabela no paró de gritar y desesperada acusó a su amante de haberla abusada y de aprovecharse de su cariño de amigos. “Ella y yo somos amantes desde antes de que ustedes andaran y seguimos siendo amantes hasta ahora”.
Aunque asombrado, Rafael reaccionó tomando por la camisa a Rigoberto para golpearlo pero él le dijo que antes de pegarle debía escuchar la verdad. “Para mi mala suerte, yo sí la amé bien y tengo guardadas todas esas cartas y las fotos que me mandó, esas fotos que decía que eran nada más para mí”, le dijo Rigoberto ofuscado.
Rafael comenzó a reclamarle a los dos. ¿Qué te hice para que me traiciones de esta manera? le dijo a su mejor amigo, pero él seguía repitiendo que se había enamorado de Isabela. “Traicioné mi dignidad de hombre, pero el hijo que ella espera es mío”, dijo Rigoberto antes de caer al suelo con el golpe que le propinó el protagonista.
“La desalmada” se acerca a su desenlace con la promesa de cambiar el destino de todos sus personajes. El melodrama se ha convertido en el gran favorito del públicon con altos índices de ránting tanto en México como en Estados Unidos donde también comenzó a transmitirse.
