Mediante un comunicado oficial compartido por la Familia Real, se reveló que la reina Isabel II, había fallecido a los 96 años de edad, con más de 70 años a la cabeza de la corona británica, y después de haber celebrado el Jubileo de Platino dos meses atrás, “La Reina murió pacíficamente en Balmoral esta tarde”, se lee en el trascendido.
Sin embargo, semanas atrás, se reveló que la monarca habría hecho varios cambios en su testamento, dejando a un par de familiares fuera del mismo, mientras que a otros, les habría heredado la mayor parte de sus pertenencias, entre ellas collares, anillos y pendientes.
La reina Isabel II le habría dejado sus joyas a Kate y su nieta Charlotte dejando fuera a Meghan Markle
Se estima que la reina Isabel II, durante sus 96 años de vida, poseyó una colección de joyas valuada en más de 130 millones de dólares, las cuales, tras su muerte, tendrían una nueva dueña y sería Kate Middleton, esposa de su nieto el príncipe Guillermo, quien se convertiría en reina en caso de que Guillermo se vuelva rey.
Aunque eso no sería todo, ya que, parte de la colección también sería destinada para su nieta Charlotte, hija de Kate y Guillermo, dejando fuera a su prima Lilibeth Diana, hija del príncipe Harry y la actriz Meghan Markle, siendo esta última también perjudicada, quien de igual manera estaría fuera de la última voluntad de la reina Isabel II.
Se estima que el valor de las joyas ascendería a 110 millones de dólares y serían alrededor de 300 piezas en total. Cabe recalcar, que su nieta Lilibeth Diana fue bautizada en su honor y en el de Diana, exprincesa de Gales, quien falleció el 31 de agosto de 1997.