La princesa Diana de Gales tiene una nutrida relación llena de momentos que rompieron los protocolos de la realeza. Tocar temas que velaban por el bienestar de ciertos sectores de la humanidad al parecer hicieron un ruido que a las más altas esferas no les gustó.
Uno de sus icónicos momentos fue su revolucionaria visita a la Casa Blanca en 1985. Diana acudió a visitar a las autoridades políticas de los Estados Unidos, que se reunieron junto a celebridades y personas influyentes del mundo entero.
Entre tantas personalidades, en dicha reunión estaba John Travolta. Para la época, el estadounidense ya había hecho Grease y era un símbolo del baile para el mundo entero. Motivo por el cual una de las fantasías de la duquesa de Cornualles, era sostener una pieza con el entonces famosísimo actor norteamericano.
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Él no lo sabía. Pero la primera dama de los Estados Unidos, para ese entonces Nancy Reagan, sí. Y no dudó en hacérselo saber al protagonista de Tiempos Violentos.
“Fue idea de Nancy Reagan. Mi corazón se aceleró. Toqué su hombro y cuando se volteó para mirarme le pregunté: ‘¿Le gustaría bailar conmigo?’. Todos en la habitación se hicieron a un lado y bailamos por 15 minutos”, contó hace tiempo Travolta, según un video de Univisión.
Para Travolta, hoy de 69 años, ese es uno de sus más gratos recuerdos. Dice que fue un momento sacado de una historia de cuentos de niños. Y le alegra saber que la princesa estaba alegre por haber compartido un baile con él. “Mejoró mi vida”, dice John en referencia a ese episodio.
