Margot Robbie brilla en el mundo del espectáculo por su más reciente actuación en Barbie, la película. Las salas de cine se siguen abarrotando para ver la cinta dirigida por Greta Gerwig, y protagonizada por la actriz australiana y Ryan Gosling.
El éxito del filme ha hecho que Margot se convierta en una de las actrices más solicitadas por los medios de comunicación, quienes además de querer saber detalles de la película, buscan conocer a profundidad la personalidad de la australiana de 33 años.
La forma de ser de Margot no tiene nada que ver con lo que se mostró en Barbie, de quien no hace falta aclarar que fue tan solo uno de sus tantos papeles en la industria del séptimo arte. CBS le hizo una entrevista y en el diálogo, la actriz confiesa lo duro que la pasó su madre mientras ella incursionaba en el mundo de la actuación.
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Los roles protagónicos o contratos jugosos no llegaban y las cuentas se tenían que pagar. Y como consecuencia, era su madre quien hacía magia para sacar dinero y seguir apoyando el sueño de su hija, aunque eso significara endeudarse.
Por lo tanto, la misma Margot Robbie confiesa que sus primeros salarios se destinaron a pagar la eterna deuda (moral y económica) que tiene con su madre, su principal motor para llegar al tope en el que hoy se encuentra.
“Todo lo que le debía a mi madre, lo tenía escrito, ella sacaba dinero de la hipoteca de la casa para prestarme dinero, tengo que devolver eso, un día cuando gané suficiente dinero, pagué todo, pagué la hipoteca por completo, yo estaba como, mamá, ya no te preocupes por esa hipoteca. Ya ni siquiera existe”, dijo la actriz, según un reporte de Indie 505.