Hacer un live action de un anime es complicado, pero One Piece parece haber encontrado la fórmula perfecta para lograrlo. La serie de ocho episodios que transmite Netflix alcanzó el éxito de acción real al que nunca han podido llegar Dragon Ball y más recientemente los Caballeros del Zodiaco.
El secreto está en que los productores trabajaron de la mano del mismo creador del manga y anime: Eiichiro Oda. Respetan cada una de sus exigencias para ser lo más fiel posible a la obra original y eso es lo que más gusta a los fans.
Pero una regla en especial ha llamado la atención, de quienes no son seguidores comunes de esta historia en el anime. Los que conocieron One Piece gracias al live action de Netflix esperan que haya un romance entre Nami y algunos de los chicos con los que tiene química, como Zoro, por ejemplo.
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Sin embargo, esa no es una opción. Eiichiro Oda exigió que para permitir esta serie los guionistas y productores deben cumplir que no haya ningún tipo de romance entre los Sombrero de Paja.
“Una de las condiciones de Eiichiro Oda para la adaptación live action fue que no hubiera un ‘romance entre los miembros de la tripulación’. Mientras sea un manga llamado One Piece y una adaptación live action del mismo, es difícil que [la tripulación de los Sombrero de Paja] tengan una relación romántica. (...) es difícil que Zoro y Nami tengan una relación romántica”, dijo Steven Maeda, productor de la serie, según Vida Extra.
“Eres libre de leer y sentir lo que quieras de la serie. Esa es la gracia de ver un programa de televisión”, pero no va a suceder nada más que una bonita amistad entre ambos, añade el productor.
