Después de una exitosa carrera de 17 años en la industria de la música, la cantante Taylor Swift ha alcanzado un hito impresionante al convertirse en una multimillonaria oficial.
Según informes de Bloomberg, el patrimonio de Taylor supera los 1.000 millones de dólares (946,7 millones de euros). Este logro ha sido respaldado en gran medida por su gira “The Eras Tour”, que ha sido un éxito rotundo tanto en ventas de entradas como en mercancías.
En el informe se hizo un análisis de las ganancias de Taylor, teniendo en cuenta únicamente datos económicos confirmados. Su cálculo incluye el valor de su catálogo musical, estimado en unos 400 millones de dólares, así como los ingresos generados por sus conciertos y mercadotecnia, que suman alrededor de 370 millones de dólares.
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Además, se consideran las reproducciones en plataformas de streaming como YouTube y Spotify, que aportan otros 120 millones de dólares.
A esto se suman sus propiedades, valoradas en unos 110 millones de dólares, y los derechos de autor de la venta de su música, que ascienden a aproximadamente 80 millones de dólares. En total, estas cifras alcanzan los 1.080 millones de dólares.
Cabe destacar que estos cálculos conservadores no tienen en cuenta posibles ganancias adicionales en inversiones no rastreadas o en empresas desconocidas, así como en activos como ropa de alta gama, joyas o vehículos.
Además, la gira “The Eras Tour” aún tiene dos tercios por completar, lo que implica que Swift seguirá generando ingresos considerables en el futuro cercano.
Impacto de Taylor Swift
La popularidad de Taylor no solo se refleja en su patrimonio, sino también en su influencia en la economía de las ciudades por las que ha pasado.
Se estima que su gira ha aportado hasta 4.300 millones de dólares (4.070 millones de euros) a la economía estadounidense. Solo en Los Ángeles, sus conciertos generaron alrededor de 150 millones de dólares.
En México, sus cuatro conciertos junto con la maratón de la ciudad dejaron aproximadamente 1.033 millones de pesos (alrededor de 61,5 millones de dólares en ese momento).
Con tan solo 31 años, Swift ha construido un imperio musical y financiero impresionante.
Su enfoque en la música y los conciertos, evitando campañas de moda o belleza, ha demostrado ser una estrategia exitosa para maximizar sus ingresos.
A medida que continúa regrabando sus discos y expandiendo su gira, es probable que su patrimonio siga creciendo en los próximos años.
