La noticia de que México no acudirá a la Expo Universal de Osaka 2025 ni a la Feria Internacional de Turismo (FITUR) en Madrid no ha sorprendido tanto a la industria, pues la postura del país ya se conocía. Sin embargo, sí ha generado reacciones entre el público en general y los mismos mexicanos. Estas ausencias resultan significativas porque, en ediciones previas, México había tenido una participación destacada, logrando importantes reconocimientos y fortaleciendo su presencia global.
En la Expo Universal de Dubái 2020, el pabellón mexicano fue galardonado con premios que destacaron su creatividad, innovación y capacidad para representar la riqueza cultural del país. Durante ese evento, México obtuvo el primer lugar en diseño, un reconocimiento recibido por la subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos, Martha Delgado. Estos encuentros internacionales son escaparates clave para fortalecer la imagen de México en el mundo, tanto en términos culturales como económicos, además de abrir nuevas oportunidades comerciales y de inversión.
En esta ocasión, México comunicó en noviembre de 2023 su decisión de no participar en Osaka 2025, argumentando que el presupuesto destinado al evento estaba en duda debido a las elecciones presidenciales de junio del mismo año. Cabe destacar que para la Expo de Dubái, que terminó realizándose en 2021 debido a la pandemia, el país tuvo que recurrir al apoyo financiero de los estados de Oaxaca e Hidalgo para poder cumplir con sus compromisos internacionales.
En este sentido, Bernardo Noval, promotor cultural y CEO de Moment Lab, destacó la importancia de la presencia de México en este tipo de convocatorias internacionales. “Participar como país en expos universales, como la Expo 2020 en Dubái o la Expo 2025 en Japón, es fundamental para fortalecer la diplomacia cultural y promover el soft power. Estas plataformas ofrecen una oportunidad única para mostrar la identidad cultural, las innovaciones y los logros de cada nación, fomentando un diálogo intercultural que trasciende fronteras.
Al unirse en un espacio global, los países pueden establecer lazos económicos, compartir conocimientos y fortalecer relaciones bilaterales, lo que contribuye a un entendimiento mutuo y a la cooperación en desafíos comunes. Además, la participación en estas ferias permite a las naciones posicionarse en el escenario internacional, atraer inversiones y turistas, y demostrar su compromiso con la sostenibilidad y el desarrollo. En un mundo cada vez más interconectado, estas exposiciones se convierten en un vehículo esencial para el entendimiento y la colaboración entre culturas, destacando la relevancia del soft power en la construcción de un futuro más armonioso”, señaló Noval.
México y su ausencia en FITUR 2025
En el ámbito del turismo, la decisión de no participar como país en FITUR 2025 también ha generado cuestionamientos, especialmente considerando que este es el primer año de funciones de Josefina Rodríguez Zamora como secretaria de Turismo federal. México es la séptima potencia mundial en turismo, una posición privilegiada que ha mantenido gracias a su diversidad cultural, natural y gastronómica. FITUR, como uno de los eventos más importantes del sector a nivel global, representa una plataforma estratégica para atraer más visitantes internacionales, establecer alianzas con operadores turísticos y consolidar la posición de México como un destino imprescindible.
Aunque no se han esclarecido completamente las razones oficiales detrás de estas ausencias, se presume que están relacionadas con restricciones presupuestarias, cambios en la estrategia de promoción internacional o una reorientación de prioridades gubernamentales. No obstante, expertos advierten que estas decisiones podrían significar una pérdida de visibilidad para el país en un momento clave, cuando la competencia por atraer turistas e inversiones es más intensa que nunca.
A pesar de que México no estará presente como país socio en la feria madrileña, varios estados han confirmado su participación en FITUR 2025. Cuatro gobernadores han anunciado formalmente su asistencia: Nuevo León, Yucatán, Quintana Roo y Baja California. Asimismo, se espera representación de alto nivel por parte de Veracruz y de la Ciudad de México, que estará encabezada por la secretaria local de Cultura, Alejandra Frausto.
Tulum y su papel en FITUR
Jorge Molina, director de Promoción Turística del Ayuntamiento de Tulum, destacó que la participación de México en el pabellón de América en FITUR 2025 representa tanto un reto como una gran oportunidad. Según datos de la plataforma de viajes Skyscanner, Tulum se ha consolidado como el segundo destino internacional más buscado por los turistas españoles. Este dato refuerza la importancia del mercado español para el turismo en Tulum, especialmente considerando la reciente inauguración del nuevo aeropuerto en la región, las infraestructuras en desarrollo, como el Parque del Jaguar y el Tren Maya, así como la apertura de nuevos hoteles.
Molina señaló que la promoción del turismo en México, apoyada por el gobierno federal, contribuirá significativamente a captar el interés del perfil de viajero español. Además, mencionó que Tulum, con su creciente infraestructura y servicios de transporte de calidad, puede convertirse en “la punta de lanza para impulsar el turismo en la región del Caribe Maya y fortalecer la estrategia turística federal”.
Participación de otros estados y expectativas
Además de los estados mencionados, Jalisco, Guerrero, Chihuahua, Chiapas, Durango, Guanajuato y Zacatecas también han confirmado su participación en FITUR 2025, junto con ciudades como Monterrey y el operador de hoteles Grupo Norte 19.
Se espera que FITUR reciba más de 150 mil profesionales de miércoles a viernes, y alrededor de 100 mil visitantes del público general durante el fin de semana. Este evento tendrá un impacto económico significativo para Madrid, estimado en 445 millones de euros, con beneficios para sectores como movilidad, hotelería, gastronomía, cultura y ocio.
A pesar de los desafíos que enfrenta México con estas ausencias, la expectativa de la industria es que el país mantenga su relevancia en el ámbito global. Sin embargo, surge una pregunta inevitable: ¿está México dejando pasar oportunidades estratégicas en el escenario internacional?
Análisis: México pierde la oportunidad de ser país socio de FITUR 2025 por José Antonio López Sosa
La administración anterior, encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador y con Miguel Torruco al frente de la Secretaría de Turismo, había asegurado que México sería el país socio de la Feria Internacional de Turismo (FITUR) en 2025. Este acuerdo fue alcanzado en colaboración con Juan Enrique Suárez del Real Tostado, entonces secretario de Turismo de Nayarit y presidente de la Asociación de Secretarios de Turismo (ASETUR), y anunciado oficialmente durante FITUR 2024. Sin embargo, un año después, este compromiso no se concretó debido a una serie de factores que revelan una planificación insuficiente y cambios administrativos imprevistos.
Uno de los principales problemas fue la falta de previsión respecto al cambio de administración federal en 2024, así como las transiciones en los gobiernos estatales. Estas transiciones complicaron la coordinación y, sobre todo, la asignación de recursos necesarios para que México pudiera cumplir con el compromiso de ser país socio de FITUR 2025. La falta de presupuesto suficiente llevó a que México negociara con IFEMA (la institución organizadora de la feria) posponer este rol hasta 2026. Como resultado, Brasil ocupó de manera inesperada el lugar de país socio para la edición de 2025.
A pesar de este revés, el gobierno mexicano trató de presentar esta negociación como un logro al argumentar que se realizarán acciones tanto dentro como fuera de FITUR para mantener una presencia significativa en la feria. Sin embargo, este cambio se percibe más como una pérdida que como un avance, especialmente considerando que FITUR es la feria de turismo más importante del mundo hispanohablante. El hecho de no cumplir con el compromiso afecta la imagen de México y deja a Josefina Rodríguez Zamora, actual secretaria de Turismo federal, con un problema heredado de la administración anterior.
Desde un punto de vista estratégico, la decisión de posponer la participación como país socio hasta 2026 parece lógica para evitar un mayor descalabro financiero y de organización. No obstante, la situación sigue siendo negativa, ya que México pierde la oportunidad de aprovechar FITUR 2025 para fortalecer su posicionamiento turístico global en un momento crucial para la competencia en el sector.
Además, la nueva administración tomó otra decisión relevante: por primera vez, la empresa CREA, que tradicionalmente gestionaba el Pabellón de México en FITUR y otras ferias internacionales, no será responsable de esta tarea. En su lugar, la operación ha sido delegada a la empresa Euroamérica, que previamente organizó eventos como los Tianguis de Pueblos Mágicos en Barcelona, San Antonio y Los Ángeles. Hasta el momento, la participación de Euroamérica se percibe como más organizada y estructurada en comparación con CREA, lo cual podría ser un cambio positivo. Euroamérica también acompañará a Puebla en su participación en Madrid Fusión, otro evento clave en la capital española.
La cancelación como país socio de FITUR 2025 también tuvo implicaciones financieras. Se reporta que ya se habían realizado pagos significativos, como la reserva de habitaciones de hotel para los eventos relacionados, y algunos de estos gastos no pudieron ser renegociados o recuperados. Aunque estos detalles aún no se han aclarado completamente, será importante monitorear los informes que se publiquen a través de los canales de transparencia.
En términos generales, esta situación no solo afecta la reputación de México ante FITUR e IFEMA, sino también frente a otros países y actores de la industria turística internacional. A pesar de que se mantendrá una participación significativa de estados como Puebla, Nuevo León, Yucatán y Quintana Roo, el hecho de no ser país socio en 2025 representa una oportunidad perdida en términos de proyección turística y diplomacia cultural.
La decisión de posponer el rol de México como país socio de FITUR hasta 2026 refleja una falta de continuidad administrativa y presupuestaria que afecta la estrategia turística nacional. Aunque la nueva administración ha tomado decisiones razonables para mitigar las consecuencias, el impacto negativo en la imagen internacional del país es innegable. FITUR 2025 representaba una plataforma invaluable para posicionar a México como líder en turismo cultural y sostenible, así como para atraer inversiones y turistas. Ahora, el reto será aprovechar las próximas ediciones de la feria para recuperar el terreno perdido y demostrar un compromiso sólido con el sector turístico a nivel global.
La expectativa queda puesta en cómo IFEMA y los demás países participantes percibirán esta decisión, y si México logrará convertir este revés en una oportunidad a futuro. Sin embargo, hasta ahora, la situación se percibe como un retroceso en términos de promoción turística y posicionamiento internacional.