El reconocido exreguetonero Daddy Yankee ha tomado medidas drásticas para recuperar el control de sus empresas El Cartel y Los Cangris, en medio de un proceso legal con su aún esposa, Mireddys González. Ramón Ayala Rodríguez, nombre real del artista, contrató a Carlos Cases Gallardo, exjefe del FBI en Puerto Rico, para liderar el proceso de transición empresarial y garantizar la transparencia en esta nueva etapa.
Experto en seguridad bancaria al mando
Según un comunicado de prensa emitido por Jean Paul Vissepó, abogado de las empresas de Daddy Yankee, se confirmó la contratación de CCG Consultants, LLC, dirigida por Cases Gallardo. Este profesional es reconocido por su experiencia en investigaciones y seguridad bancaria, habilidades esenciales para resolver los problemas de documentación y organización empresarial detectados durante el proceso de transición.
Cases Gallardo trabajará junto a un equipo de asesores financieros para ordenar las corporaciones y establecer estándares de transparencia y rigurosidad. “La experiencia y respeto de Cases serán clave para garantizar el funcionamiento óptimo de las empresas bajo la presidencia de Daddy Yankee”, destacó Vissepó.
Conflicto legal con su aún esposa
El proceso legal entre Daddy Yankee y Mireddys González ha sido complicado, con denuncias de falta de documentación vital y transparencia en la gestión de las empresas. Recientemente, el equipo legal del artista calificó como “improcedente” la solicitud de González de nombrar un administrador judicial para las corporaciones, argumentando que dicha petición carece de fundamentos jurídicos sólidos.
Carlos Díaz Olivo, abogado de Daddy Yankee, describió la solicitud como “frívola y temeraria” y reiteró el compromiso del artista de manejar sus empresas con integridad. Este conflicto legal subraya la complejidad del proceso de reorganización, mientras Daddy Yankee asume un rol activo como presidente de sus corporaciones.
Futuro de las empresas de Daddy Yankee
Con la incorporación de un experto como Cases Gallardo, el artista busca superar los desafíos legales y administrativos que enfrenta, fortaleciendo la estructura de sus empresas. Este movimiento estratégico refleja su determinación de garantizar el éxito y la sostenibilidad de sus negocios en esta nueva etapa.