La cinematografía es una de las artes más valoradas a nivel mundial, ya que las historias contadas en formato audiovisual despiertan todo tipo de emociones en quienes disfrutan de las películas, sin importar su género.
Sin embargo, cuando hablamos de cine mudo, nos adentramos en uno de los géneros más controversiales, especialmente entre quienes no están tan familiarizados con el séptimo arte. Para algunos espectadores, estos filmes pueden parecer “aburridos”, e incluso se cuestiona su capacidad para provocar risas sin diálogos.
Pese a esta percepción, el cine mudo sigue siendo profundamente admirado por muchos, ya que representa los orígenes del arte cinematográfico. Uno de los nombres más emblemáticos de esa época es Charles Chaplin, el célebre cineasta y actor de los años 20 y 30, quien inmortalizó su visión política y social a través de sus obras.
Chaplin regresa restaurado en 4K
Recientemente se anunció que una de las películas más icónicas de Charles Chaplin será reestrenada en resolución 4K, algo que ha sorprendido a muchos, considerando que las grabaciones de principios del siglo XX no contaban con la tecnología que hoy en día permite este tipo de restauraciones.
El medio especializado Variety fue el encargado de dar la primicia: se trata de “La quimera de oro”, película que ha sido restaurada para ser presentada por primera vez en esta calidad en el Festival de Cannes, y luego lanzada a nivel mundial. Este reestreno coincide con el centenario del primer estreno del filme en el Teatro Egipcio de Los Ángeles.
Según Thierry Frémaux, director del Festival de Cannes, la restauración se hizo en el marco de los 130 años de la invención del cinematógrafo de los hermanos Lumière, uno de los hitos más importantes de la historia del cine:
“Al celebrar los 130 años de la invención del cinematógrafo de los hermanos Lumière, el clásico tan querido de Chaplin, que combina aventura, romance y comedia, celebrará su centenario con un estreno especial en la Croisette”, afirmó Frémaux.
Este homenaje no solo celebra la longevidad del cine como arte, sino también la atemporalidad del legado de Chaplin, quien sigue provocando sonrisas y reflexiones a más de un siglo de distancia.