En Guanajuato, la temporada de peregrinaciones llena las carreteras de fe, pero también incrementa los riesgos. Por ello, la Coordinación Estatal de Protección Civil ha emitido una serie de recomendaciones dirigidas tanto a los peregrinos como a los automovilistas que comparten las vialidades.
Preparación y seguridad para peregrinos
Los peregrinos deben tomar precauciones especiales para garantizar su seguridad durante el trayecto. Entre las principales recomendaciones se encuentran:
- Portar un gafete de identificación con datos personales y números de contacto en caso de emergencia.
- Consumir alimentos higienizados o enlatados para evitar enfermedades.
- Llevar una lámpara de mano, baterías de repuesto y ropa con cintas reflejantes para caminatas nocturnas.
- Abrigarse adecuadamente para prevenir problemas de salud relacionados con el frío.
- Mantenerse hidratados, preferentemente con agua purificada.
- Avanzar en un bloque compacto, con un vehículo guía equipado con luces preventivas.
- Evitar que los automóviles de apoyo se detengan sobre la carretera.
- Contar con artículos esenciales como zapatos cómodos, suero, analgésicos, bloqueador solar, impermeable y papel sanitario.
Automovilistas: atención y respeto en la carretera
Por su parte, los automovilistas que se encuentren con peregrinaciones deben extremar precauciones para evitar accidentes. Entre las recomendaciones para quienes conducen están:
- Reducir la velocidad y encender las luces intermitentes al aproximarse a peregrinaciones.
- Mantener una distancia prudente con otros vehículos.
- Evitar frenar bruscamente o intentar rebasar.
- Respetar los vehículos abanderados que guían las caravanas.
- Atender las indicaciones del personal de Protección Civil.
La Coordinación Estatal de Protección Civil subraya que la seguridad en las carreteras es una tarea conjunta. Tanto peregrinos como automovilistas tienen la responsabilidad de seguir estas recomendaciones para reducir riesgos y fomentar una convivencia armónica.
En esta temporada, donde la devoción mueve a miles, la prudencia y el respeto en las vialidades pueden marcar la diferencia entre un trayecto seguro y uno lleno de peligros.
