Dos funcionarios públicos, custodios del penal de Puente Grande, fueron separados de su cargo, mientras se llevan a cabo las indagatorias de una presunta agresión sexual contra cuatro custodias dentro de la penitenciaria de Readaptación Social, hecho que según los reportes habría ocurrido el pasado 10 de febrero.
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Las autoridades estatales insistieron que los señalamientos son falsos y que cuentan con declaraciones y actas firmadas donde no se reportan eventos de gravedad en la jornada cuando ocurrió el presunto ataque.
La titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDHJ), Luz del Carmen Godínez, señaló que tras darse a conocer este incidente se presentaron medidas cautelares de las cuales sólo se aceptó una, la separación del cargo de dos supervisores que estaban la noche del supuesto incidente. Se emitieron otras tres medidas cautelares, pero que no fueron aceptadas por la Dirección General de Prevención y Reinserción Social:
“Como no hubo aún denuncia todavía, las otras medidas no aplicaban si aceptaron la medida cautelar de remover a los señalados mientras se hace la investigación”, citó la ombdusman.
Señaló que de momento la defensoría tampoco ha recibido quejas o denuncias de que las custodias hayan sido víctimas de hostigamiento para evitar que denunciaran.
Rechazan que el incidente hubiese ocurrido
Por medio de sus redes sociales, el gobernador del Estado, Enrique Alfaro, enfatizó que son falacias los señalamientos que se hacen sobre la presunta violación ocurrida en el Centro Penitenciario de Puente Grande e incluso se presentó un documento oficial, un acta circunstanciada, donde 19 custodias afirman que la noche de la presunta violación tumultuaria no se presentaron incidentes de gravedad.
En dicha acta se afirma que las puertas de la torre de vigilancia se cierran por dentro y por fuera y, por tanto, no pudo ocurrir el incidente de violación.
