Como parte de su gira por San Sebastián del Oeste, el gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, sostuvo un encuentro clave con empresarios dedicados a la producción de raicilla artesanal, donde se lograron acuerdos significativos para fortalecer esta tradicional industria jalisciense.
La raicilla, un destilado de agave con raíces históricas que datan de la época colonial, ha ganado relevancia en el mercado nacional e internacional. Originalmente elaborada para evitar los impuestos de la Corona Española, esta bebida espirituosa ha encontrado su espacio en la gastronomía y cultura mexicana.
Durante la reunión, el gobernador Lemus reafirmó su compromiso con los productores, prometiendo apoyos concretos que incluyen la promoción de la raicilla en catas y exposiciones dentro y fuera del país.
“Podemos apoyar de forma directa e indirecta a la industria, nos han comentado de peticiones con el Gobierno Federal sobre la norma en la Secretaría de Economía, poder facilitar que los patrones, según el tamaño de productores”, manifestó el ejecutivo estatal.
Por su parte, el secretario de Agricultura de Jalisco, Eduardo Ron, destacó el notable crecimiento que ha tenido la producción de Raicilla en los últimos años.
“Cerraron el 2024 con 550 mil litros y han incrementado la producción 500% en los últimos 5 años, es un dato a notar y resaltar, puede tener un crecimiento espectacular”, señaló.
Asimismo, Clementina Landeros, productora de Raicilla en el municipio de Mascota, compartió una perspectiva histórica sobre esta bebida ancestral.
“Son 16 municipios en Jalisco y uno en Nayarit que es Bahía de Banderas, la tradición es que se destilaba para el impulso de las minas y trabajadores, después en las haciendas para socavos, fiestas de fin de cosecha, entonces se le daba a toda la gente raicilla”, dijo la empresaria.
La Raicilla, más que una bebida, representa una herencia cultural que hoy recibe el respaldo gubernamental para alcanzar nuevos mercados y fortalecer su posición como uno de los destilados más emblemáticos de México.