Luego de dos años del feminicidio de Jessica González Villaseñor, el pasado 15 de febrero Diego Urik fue sentenciado a 50 años de prisión por el feminicidio de la profesora de 21 años ocurrido en septiembre de 2020 en Michoacán.
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Michoacán informó que el imputado que se encuentra en el penal de Mil Cumbres, un centro penitenciario ubicado en la carretera Morelia-México, también tendrá que pagar un millón 246 mil pesos por daño moral, gastos funerarios y la muerte de la mujer.
El juez Ariel Montoya Romero informó su decisión al considerar como justa los argumentos de la defensa, ya que el feminicida incurrió en actos violentos hacia la víctima como cosificarla. La familia de Jessica tendrá 12 sesiones de tratamiento psicológico incluidas en la decisión final del juez.
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Feminicidio de Jessica
El 21 de septiembre de 2020 Jessica González Villaseñor fue reportada como desaparecida ante la FGE de Michoacán y tras la presión en redes sociales las autoridades estatales tomaron acción inmediata en el caso.
En las investigaciones de la Fiscalía estatal, se encontró el teléfono móvil de la víctima en el domicilio de Diego Urik, ubicado en el fraccionamiento Montaña Monarca, por lo que se convirtió en el primer sospechoso por el delito de feminicidio de la profesora.
Diego Urik intentó evadir la ley con ayuda de amistades y grupos feministas organizaron movilizaciones para exigir justicia para Jessica, hasta el 25 de septiembre cuando la FGE de Michoacán encontró el cuerpo de Jessica con señales de violencia en el cuerpo, la cabeza y rastros de asfixia.
La autoridad estatal emitió la primera ficha de búsqueda para encontrar al agresor con la oferta de un millón de pesos para quien tuviera información de su ubicación y nadie cobró la oferta hasta el 30 de septiembre que durante un operativo con las autoridades de Jalisco y Michoacán fue detenido en Jalisco.
