La madre del periodista Mauricio Cruz Solís, asesinado a tiros el pasado 29 de octubre, se pronunció contra el alcalde de Uruapan, Carlos Alberto Manzo Rodríguez, durante una emotiva manifestación en la que familiares, amigos y colegas exigieron justicia.
De esta manera, Guillermina Solís no sólo recordó el compromiso que su hijo tenía con el periodismo, sino que también denunció lo que considera un entorno hostil hacia los comunicadores en la región.
De acuerdo con la madre del periodista, no fue ninguna casualidad que su hijo fuera asesinado apenas dos minutos después de entrevistarse con el alcalde.
“Si esto me va a costar la vida, aquí estoy. Estamos exigiendo justicia, no solo porque era mi hijo, sino porque era un periodista responsable que trabajaba incansablemente”, dijo la señora Guillermina.
Omisión de las autoridades y apoyo del gremio
En medio de la manifestación, realizó un emotivo pase de lista en honor a Mauricio, subrayando la pérdida de un hombre que dedicó su vida al trabajo y al servicio de su comunidad.
“Agradezco a quienes no tuvieron miedo y nos acompañaron en esta caminata por la justicia”, expresó lamentando que su hijo fue asesinado mientras realizaba su labor informativa.
Por otro lado, Solís también criticó la omisión de las autoridades, señalando que el asesinato ocurrió en pleno centro, con presencia policial, y que nadie parece haber visto nada. “Pido justicia aquí en la tierra. En el cielo, sé que ya descansa”, dijo, mientras llamaba a no permitir que se dañe la imagen de Mauricio, un joven comprometido que muchas veces sacrificó el tiempo con su familia por su trabajo.
¿Cómo murió el periodista Mauricio Solís?
El asesinato del comunicador ocurrió justo después de que el alcalde le otorgó una entrevista. Este hecho ha acentuado la controversia en torno a la reacción de la policía municipal y del propio alcalde, quien, en una primera respuesta tardía, argumentó que las circunstancias fueron demasiado rápidas para actuar.
Manzo indicó que se encontraba a unos pocos metros de la escena cuando escuchó los disparos, pero su decisión fue resguardarse junto con sus escoltas. Tan sólo dos minutos después de terminar la entrevista, fue asesinado a tiros por sujetos armados, lo que ha llevado al gremio periodístico a exigir justicia y a responsabilizar a las autoridades locales por el clima de violencia que enfrenta la prensa.
Finalmente, colegas de Solís lamentan que las palabras del alcalde hayan podido alimentar un ambiente hostil hacia los comunicadores y haber tenido un impacto directo en el ataque que cobró la vida del periodista.
