Con información y apunte de Automotive News. Barack Obama y su gestión podrían ser recordados como el mejor Presidente en la historia de la industria automotriz estadounidense, toda vez que su plan salvó a las “big 3” de la bancarrota y procuró su recuperación para potenciar el empleo en el país norteamericano.
Estos 8 años de gestión serán recordados como el periodo más crucial para las armadoras, no solo en términos de cambios estructurales y tecnológicos, sino también en el profundo papel del gobierno que determinó prioridades de inversión para hacer resurgir a la industria.
El jefe del personal de Obama destinado a dar seguimiento a la industria y al momento que se vivía en la crisis de 2008, mencionó en su momento: “Nunca se piensa ni se debe desperdiciar una crisis severa. Es una oportunidad de hacer cosas que no habríamos hecho antes”.
Finalmente, la industria se recuperó y superó su máximo histórico, impulsando una renovación de producto y una mira más global que no dependiera tanto de la estabilidad económica local. Sin importar quién resulte electo presidente, es difícil que un momento así se repita y brinde la oportunidad a alguien más de hacer lo que se realizó en estos últimos años.