¿Te gusta aprovechar el tráfico para platicar con alguien o hacer una llamada con la finalidad de chismear? Al parecer, esto no es tan malo como parece.
Si nos vamos al significado de la palabra «chismear», según la RAE, significa «hablar con indiscreción o malicia de alguien o de sus asuntos». Sin embargo, un nuevo estudio sugiere que no necesariamente, cuando hablamos de alguien más, lo hacemos de forma tóxica.
Con información de Association for Psychological Science, las personas hablan de alguien que no está presente alrededor de 52 minutos al día. Aunque puede parecer algo negativo, el estudio, encabezado por Megan Robbins, psicóloga de la Universidad de California en Riverside, reveló que una gran mayoría de los chismes son neutrales.
Para ser más exactos, alrededor de tres cuartas partes de la conversación no son juicios positivos ni negativos, es decir, están libres de prejuicios.
Uno de los más grandes beneficios al momento de dialogar con otras personas es la retroalimentación. El escuchar las opiniones de otras personas nos enriquece, siempre y cuando exista la madurez y la apertura para ello.
A su vez, el dar nuestra opinión con respecto a alguna situación también nos ayuda a escucharnos a nosotros mismos. Es decir, es más fácil identificar nuestro propio discurso cuando platicamos con otras personas.
Para ello, es necesario que la persona practique la autoobservación y esté interesada en su proceso de aprendizaje y crecimiento personal.
Sin embargo…
Si las opiniones tiene una intención de manipular o convencer al que escucha, este ejercicio resulta tóxico. A su vez, si el chisme tiene como finalidad evidenciar a alguien, hacer uso de cierta información y ser indiscreto, el chisme se convierte en un recurso que sirve a otro fin.
De esta manera, una cosa es platicar y hablar con respecto a cierta situación como ejercicio de retroalimentación y como parte natural de una interacción social sana, y otra cosa es develar información y transgiversar los hechos con el objetivo de dañar la reputación de alguien más.
Y a ti, ¿qué tipo de chisme te interesa?
