Aunque uno procure no comer en el auto, a veces es inevitable pasar por unos tacos para comer en casa. Sin embargo, seguramente ya te habrás dado cuenta que esto conlleva emitir un olor muy fuerte que se impregna rápidamente al interior de tu auto.
El problema es que, si vas a subir a otra persona, no comprenderá la procedencia del olor y puede resultarle muy desagradable.
¿Qué se puede hacer?
Si únicamente estás transportando la comida y no tienes para qué abrirla, te recomendamos cargar un toper que tenga un buen sellado. No basta con la bolsa que te dan en la taquería. Es necesario meter la comida a un contenedor cerrado y sellado.
También, si la seguridad de la zona te lo permite, es indispensable mantener los vidrios abajo para que circule el aire. Si vas a comer adentro del auto, evitar el olor es más complicado: cuando abras los envases de la comida, el olor inmediatamente va a salir. Sin embargo, el problema real radica en los pequeños residuos que puedan caer y sí, tú serás también el portador del aroma, no únicamente el vehículo.
Después de comer tacos…
Si no puedes evitar comer dentro del auto, debes realizar algunas acciones inmediatamente después de hacerlo.
– Si no tienes una aspiradora portátil, te recomendamos que consigas una. Limpia y sacude los tapetes y posteriormente aspira los asientos y el área donde la comida tuvo contacto. Aunque tú no veas las partículas de la comida y aparentemente el auto esté limpio, la realidad es que habrán residuos en los rincones y las orillas de los asientos.
– Después, espolvorea un poco de bicarbonato de sodio y déjalo por unas horas. Finalmente, aspíralo nuevamente. El tener un poco de carbón vegetal dentro del auto también será de utilidad.
¿Aromatizante? Ayuda, pero no resuelve. Recuerda también que debes evitar limpiar las vestiduras con agua, debido a que esto puede ocasionar un fuerte olor a humedad. Si algo se ha derramado, es mejor que tengas a la mano un limpiador multiusos biodegradable tipo desengrasante.
Es importante destacar que las acciones anteriores no sustituyen la limpieza profunda de rutina. Esta deberá ser mucho más recurrente si insistes en pasar por tus tacos y comerlos en el coche.
¿Cuál ha sido tu experiencia?