¿La luz amarilla del semáforo significa acelerar o frenar? Aunque en realidad es una luz preventiva, su funcionamiento es más complejo de lo que parece. Si nos involucramos en un debate ético, probablemente sea más prudente que el amarillo, como luz preventiva, debería ser tomada como un alto anticipado.
Pero no es así. Finalmente, el amarillo no es rojo en sí mismo y muchas personas lo interpretan como su última oportunidad para pasar. Cruzar con el semáforo en amarillo significa para muchos ganarle unos minutos al tráfico. Y sí, si vemos el comportamiento de los conductores en ciudades en comparación con las zonas rurales, veremos claras diferencias.
Es por ello que diversos estudios se han dedicado a medirlo y estudiarlo. Porque, detrás del semáforo amarillo, se encuentra un cronómetro que corre para cambiar al rojo.
Y, aunque no lo creas, la luz amarilla no tiene la misma duración en todos los semáforos.
La luz amarilla del semáforo según los expertos
El estudio «Predecir el comportamiento del conductor durante el intervalo amarillo mediante la videovigilancia» se ha dedicado a estudiar el comportamiento de los conductores en las intersecciones.
Si se toma en cuenta la distancia de inicio de la luz amarilla se pueden predecir las decisiones de parada o marcha de un conductor, incluyendo las violaciones por circular con el semáforo en rojo.
De esta manera, el cometer una infracción por cruzar el semáforo en rojo aumenta en la medida en que los conductores deciden pasar el semáforo en amarillo, junto con la distancia que tienen hasta la línea de parada.
En otras palabras: los conductores que se apresuran y aceleran para pasar tienen altas probabilidades de cometer una infracción, claramente.
Esto también depende del tiempo que dure la luz en amarillo. Entre más dure, las violaciones por pasar el semáforo en rojo disminuirían.
Sin embargo, la duración de la luz amarilla depende del tipo de calzada o avenida y del límite de velocidad.
La solución
Para evitar accidentes y que la responsabilidad recaiga únicamente en los automovilistas, una de las soluciones es que se extiendan las luces del semáforo de forma estratégica.
Mientras que una es extender la luz verde, otra más viable es extender la luz roja hasta que se garantice que los otros vehículos han atravesado la intersección de forma segura.
Eso sí, se grabarán y se registrarán a quienes cruzaron cuando estaba la luz roja. En el caso de California, Estados Unidos, existe un «Manual de California sobre dispositivos de control de tráfico uniformes» que establece el tiempo mínimo para la luz amarilla de los semáforos.
Este manual deja en manos de las localidades la opción de aumentar el tiempo para la luz amarilla. Lo que evidentemente está prohibido es reducir la duración.
Por ejemplo, si el límite de velocidad es de 40 km/h, el intervalo amarillo mínimo es de 3 segundos. Si el límite es de 56 km/h, el intervalo es de 3.6 segundos. Y por último, si es de 72 km/h, es de 4.3 segundos.
De esta manera, entre más grandes son las avenidas y mayor la velocidad, la duración de la luz amarilla debe ser mayor.
Sin embargo, ¿será peor si los automovilistas se enteran de que la luz amarilla dura más? Quizá sea mejor idea que la luz se ponga en verde hasta que todos hayan cruzado, pero llevando registro de quienes violan la normatividad.
¿Qué opinas?
