Volvo ya anunció que dirá adiós a la tecnología de propulsión vía motores de combustión interna. Todo muestra que el futuro de Volvo es elegante, electrificado y con lo último en tecnología de seguridad. Sin demasiada información respecto a las especificaciones, el diseño influirá claramente en los futuros modelos de Volvo, incluido el próximo SUV eléctrico insignia de la compañía que se dará a conocer el próximo año.
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Diseño
El frente se deshace incluso de las parrillas falsas para mostrar una fascia esculpida. Los faros delanteros «Thor Hammer Hedlights» permanecen, y en el caso del concepto, tienen luces de marcha salvajes que se deslizan hacia arriba y fuera del camino dentro de la carcasa para dar paso a los faros delanteros del proyector real durante la noche. Toda la forma del automóvil se basa en el sistema de propulsión eléctrico. Tiene un piso bajo y un techo de vidrio, lo que significa que todo el cuerpo se puede hacer más bajo y elegante sin comprometer el espacio. Las ruedas también se empujan hacia los bordes más lejanos. En la parte trasera, el automóvil tiene luces traseras verticales delgadas, continuando con la tradición de diseño de Volvo.
Conducción semi-autónoma
En el techo, hay un sensor lidar colocado en la parte superior del parabrisas. Esta es una parte importante del futuro de Volvo, ya que su próxima generación de vehículos, comenzando con el SUV mencionado anteriormente, vendrá con uno de estos sensores de serie. Se utilizará en combinación con cámaras, radares, datos en tiempo real, aprendizaje automático y datos de mapas para proporcionar ayudas avanzadas al conductor, incluido lo que Volvo describe como conducción «autónoma sin supervisión» en circunstancias específicas.
Básicamente, será la autonomía SAE Nivel 3, un paso más allá de los sistemas de manos libres, pero aún supervisados, de Nivel 2. Solo estará disponible en carreteras específicas en circunstancias específicas, por lo que no podrá manejar toda la tarea de conducción desde la entrada hasta la entrada. La empresa espera ofrecer este nivel de autonomía en las carreteras primero, y solo será en áreas específicas para comenzar.
Propulsión de nueva generación
Volvo está trabajando en actualizaciones de la batería. Está buscando mejoras en la densidad de energía de sus baterías de iones de litio del 50 por ciento en los próximos años. Para fines de la década, apunta a una densidad de alrededor de 1,000 vatios por litro, lo que dice que estaría a la par con la tecnología de baterías de estado sólido. Las velocidades de carga aumentadas también están en el expediente con sistemas de carga de 800 voltios, además de carga bidireccional para que la energía almacenada del automóvil pueda alimentar hogares y electrodomésticos.
Volvo también sigue prestando mucha atención a la cabina. En este Concept Recharge, el interior es aireado y minimalista al tiempo que utiliza materiales de calidad. La moldura de madera con retroiluminación integrada es particularmente elegante, y los asientos traseros con cojines inferiores ajustables en altura son excelentes para la seguridad y la visibilidad de los niños. Sin embargo, lo más relevante es el grupo de instrumentos y el sistema de información y entretenimiento. Estos cuentan con la próxima generación de infoentretenimiento de Volvo, que parece ir completamente a los controles táctiles. El diseño cuenta con una pantalla de instrumentos delgada y un cluster de información y entretenimiento vertical. En este caso, es una de 15 pulgadas.
Veremos nuestras primeras implementaciones de producción de esta tecnología y estilo con el SUV insignia de Volvo del próximo año. Se ha descrito como el sucesor del XC90. Volvo señaló que adoptará un nombre real en lugar de alfanumérico, lo que supone un gran cambio para la marca. También podemos ver que parte de esta tecnología aparece en el crossover Polestar 3 que también está en camino.
