Han pasado 60 años y Godzilla sigue gustando e impactando de generación en generación. El monstruo más famoso de la pantalla grande regresa este fin de semana en una nueva versión cinematográfica, ahora de la mano del director Gareth Edwards, quien platica con Publimetro acerca de las diferencias y las similitudes que hay entre su creación y la bestia original.
¿Cómo hacer para lograr conservar el aspecto original de Godzilla y, al mismo tiempo, hacer un nuevo e intimidante monstruo para una audiencia del siglo 21?
— Bueno, le dijimos a los diseñadores: ustedes tienen que tratar de hacerlo: conservar a Godzilla, pero tratar de actualizarlo. Imagina que hace sesenta años Godzilla era un animal real, realmente existió en el océano, salió y fue visto por la gente en Japón. Nadie tomó una foto, sin embargo, todos fueron corriendo y gritando a Toho Studios (donde se hicieron las películas originales) y trataron de describirlo. Así fue que hicieron todas las películas que nosotros conocemos y amamos.
En nuestra película, la idea es que van a ver al animal original, pero nos dimos la licencia de hacerlo más realista, potencialmente. Lo principal que traté de hacer fue perfeccionar las formas, unas líneas que le dan más agresividad a su rostro y una silueta que hace que se vea más feroz.
¿Cómo deciden en qué ciudad se realizaría Godzilla?
— Nos trajimos a este ícono japonés a América. Lo más relevante es que comienza en Japón. La película comienza en Asia, y para el final de la historia, llega a América .
De repente se ve en Los Ángeles, luego está en San Francisco, porque queríamos una ciudad que tuviera conexión con el océano. Sin afán de ofender, San Francisco es el mejor parque de diversiones para Godzilla.
¿Tú viste las 28 versiones de Toho Studios?, ¿hubo alguna en especial que inspirara tu trabajo?
— Sí, por supuesto, la principal es la original, la película de 1954 en blanco y negro. Para una gran cantidad de personas que no saben acerca de Godzilla o crecieron con algunas de las versiones posteriores adaptadas más a los niños, es una sorpresa ver la original, ya que en realidad es una metáfora muy fuerte y muy grave de Hiroshima y Nagasaki. Pero en ese tiempo, había mucha censura en Occidente después de la Segunda Guerra Mundial, no se podía hacer ninguna película sobre la Segunda Guerra Mundial o de situaciones relacionadas a ella, así que se disfrazó dándole forma de una película de monstruos. Eso fue un poco nuestro punto de referencia.
¿Este Godzilla que tu creaste es totalmente animación?
— Sí, fue sólo animación. Al principio nos fijamos en cientos de videos que mostraban el comportamiento de los animales, al igual que documentales de vida salvaje. Mi primer acercamiento a este proyecto debía ser algo tan simple como copiar la naturaleza.
Nos fijamos en los osos que luchan y todo tipo de cosas diferentes. El problema que encontramos con esto es que cuando estás viendo uno de estos programas de vida silvestre, hay dos animales en la pantalla y no sabes qué diablos está pasando entre ellos. Hay quienes narran esas cosas, pero es muy confuso, ¿los animales están enojados o asustados? Así que en esos momentos nos alejamos un poco de los animales y nos acercamos más hacia el comportamiento humano.
El dato:
2,000 copias de Godzilla se distribuirán este viernes en México, en 3D, 2D y IMAX.
¿De qué trata?
Gareth Edwards presenta una historia de valor humano y reconciliación con las grandes fuerzas de la naturaleza. Godzilla resurge para restaurar el equilibrio cuando la humanidad se encuentra indefensa. Es protagonizada por Aaron Taylor-Johnson y Elizabeth Olsen.