The Last Dance continúa con gran éxito alrededor del mundo, y no es para menos, pues es una serie que narra gran parte de la vida profesional y personal de Michael Jordan, considerado el mejor basquetbolista de todos los tiempos.
Sin embargo, hay aspectos que van más allá de los capítulos y de las cámaras. Uno de ellos, es la razón por la que la leyenda de la NBA se negó rotundamente a que las grabaciones de la serie en donde él mismo testifica, se realizarán en su mansión, la cual está ubicada en Jupiter, Florida.
- Te puede interesar: Dale color a tu hogar según tu estado de ánimo con estos tips de Comex
Jason Hehir, director de la famosa serie, reveló en entrevista con Insider que Jordan quiso mantener aspectos de su vida en privado, por eso no permitió que las grabaciones se llevaran a cabo en su casa ni en su avión privado, decisión que la producción tuvo que aceptar, orillándolos a buscar mansiones similares.
La verdadera mansión de Michael Jordan está situada en el complejo de campos de golf The Bear’s Club, una comunidad cerrada que cuenta con una caseta de vigilancia de dos pisos, 11 habitaciones y un centro de entrenamiento dedicado a la cancha de baloncesto, lujos que evitó mostrar el ex basquetbolista. «No quería que la gente viera todo eso. Lo respeté, así que no retrocedí«, señaló Hehir.
Conoce más sobre: Donan 12 TONELADAS de gel antibacterial y UN MILLÓN de jabones para hacer frente al Covid-19
La producción de The Last Dance tuvo que buscar tres casas para grabar los testimonios de Jordan. Una de ellas fue alquilada, mientras que las otras dos, fueron prestadas por amigos. «Busqué lugares en los que parecía que Michael podría vivir. Sabía cómo era su casa real y sabía que se trataba de un tipo rico que tenía ciertos gustos, así que queríamos algo que combinara con eso«, puntualizó.
LO MÁS VISTO EN PUBLIMETRO TV