Tigres es hoy uno de los equipos más destacados de la Liga MX de los últimos 10 años, sin embargo, tuvo que ir al descenso para despertar.
Fue un 24 de marzo de 1996 cuando los felinos se vieron obligados a un triunfo para quedarse en Primera División. Sin embargo, el rival no era nada fácil pues se enfrentó a Rayados en un Clásico regio.
Con goles de Luis Miguel Salvador y Sergio Verdirame, la Pandilla terminó de darle el último empujón a los felinos a la llamada Segunda División en ese entonces.
El manejo del equipo pasó a Sinergia Deportiva, y los Tigres regresaron en un año a la Primera División.
Los cambios se vieron inmediatos pues comenzó a ser un equipo que aprendió de sus errores. En unos años logró llegar a dos finales de Liga, aunque cayó contra Pachuca en el Invierno 2001 y Apertura 2003.
Los fantasmas del descenso regresarían para finales de la década pasada. Malas decisiones directivas volvieron a poner a Tigres en zona de riesgo.
Fue entonces que un nuevo cambio se vio en Tigres. Alejandro Rodríguez tomó de nuevo la presidencia y acompañado de Miguel Ángel Garza pudieron regresar a Ricardo Ferretti al banquillo.
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En la segunda década, luego del descenso, los felinos son referentes del futbol mexicano. Hasta el momento han ganado cinco Ligas, una Copa MX, tres Campeón de Campeones, una Concachampions y fueron subcampeones del Mundial de Clubes de Catar 2020.
Incluso los felinos pudieron subsanar las burlas de la afición albiazul por el descenso, al ganar la primera final regia en la Liga MX.
Recientemente la IFFHS los colocó como el mejor equipo de la década de Concacaf, al ser el equipo con más victorias dentro de la confederación.
Actualmente pelea por mantenerse en zona de repechaje, y en la búsqueda de renovar el contrato a Tuca Ferretti.
