Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos advirtieron sobre un parásito llamado crypto que se encuentra en las albercas y es resistente al cloro.
El nombre completo del parásito es cryptosporidium, es un parásito fecal que puede transmitirse a través de piscinas y su contagio está en aumento, según los CDC.
Este parásito puede generar en adultos sanos “diarrea profusa y acuosa” durante tres semanas, además los efectos pueden ser peores para los niños, mujeres embarazadas y personas con sistemas inmunológicos comprometidos.
Según el informe presentado por los CDC, el cryptosporidium es la causa principal de brotes de diarrea y la tercera causa de diarrea asociada con el contacto con animales en los Estados Unidos.
Durante el período 2009-2017, 40 estados y Puerto Rico reportaron 444 brotes de criptosporidiosis, lo que generó en siete mil 465 casos. Pero el número de brotes notificados ha aumentado a un promedio de aproximadamente el 13% por año.
Las principales causas incluyen la ingestión de agua contaminada en piscinas o parques infantiles, el contacto con el ganado infectado y el contacto con personas infectadas en guarderías.
Para prevenir los brotes de criptosporidiosis, los CDC recomiendan no nadar o tener hijos con diarrea.
¿Qué hacer cuando nadas en piscinas públicas?
Los CDC hacen una lista de recomendaciones para poder protegerse y proteger a los seres queridos de los microbios cuando vayan a disfrutar de un día de piscina.
Antes de meterse al agua:
- No nade, ni deje que los niños naden si están enfermos con diarrea.
- Haga su propia inspección. Mida los niveles de desinfectante (cloro o bromo) y de acidez del agua con tiras reactivas para asegurarse de que sean los correctos.
- La concentración de cloro libre debe ser de al menos 1 ppm en las piscinas y los parques acuáticos.
- La concentración de bromo debe ser de al menos 3 ppm en las piscinas y los parques acuáticos.