Un crucero que fue obligado a permanecer lejos de las costas de California durante varios días debido a la presencia de casos de coronavirus a bordo llegó el lunes a puerto.
El mismo lunes, decenas de pasajeros comenzaron a desembarcar para partir rumbo a bases militares donde estarán en cuarentena, o hacia sus países de origen.
El Grand Princess llegó al puerto de Oakland con más de tres mil 500 pasajeros a bordo, 21 de ellos con la presencia confirmada del nuevo virus.
Un total de 23 personas que requerían atención médica urgente dejaron el barco la tarde del lunes, pero se desconoce cuántos de ellos arrojaron positivo al virus, dijeron las autoridades
Las autoridades han dicho que el desembarco podría tomar hasta tres días.
Muchos de los casi 240 canadienses a bordo dejaron la embarcación poco después de los enfermos críticos y permanecieron afuera de dos carpas instaladas en el muelle con banderas canadienses. Canadá y Reino Unido fueron algunos de los países que enviaron aviones alquilados para repatriar a sus ciudadanos.
Los pasajeros estadounidenses serán trasladados vía aérea o por autobús desde el puerto —seleccionado por su cercanía a un aeropuerto y a una base militar— a bases en California, Texas y Georgia, donde se les practicarán análisis y permanecerán en cuarentena por 14 días.
El barco lleva a personas de 54 países, y los extranjeros serán enviados a casa.
