Ubicada en la ex república soviética de Turkmenistán, La Puerta del Infierno se ha convertido en una atracción turística, que tiene sus orígenes en un error de cálculo por parte de las autoridades de la extinta URSS, publicó Infobae.
Los altos miembros del imperio soviético encargaron a sus geólogos la búsqueda y explotación de hidrocarburos. Se dirigieron a la zona más occidental de su territorio, rico en combustibles, para hallar los recursos que necesitaban. En específico, a la población de Derweze.
Al cavar, encontraron grandes cantidades de gas natural que no pudieron explotar pues no lograron identificar el tipo de fluido que era y su impacto a la sociedad. Así que decidieron quemar el gas para evitar envenenar el ambiente.
El incendio fue provocado en 1971 y se mantiene iluminando las noches turkmenistaníes, pues lo que supusieron era un banco superficial de gas y pronto acabaría, en realidad era un depósito de millones de litros cúbicos.
Aunque se ha convertido en una atracción turística, en una comunidad de apenas 350 personas, el gobierno de Turkmenistán ha intentado cerrar el pozo por el peligro que representa, pero todo ha quedado en promesas.
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