Beto Zapata está dispuesto a cumplir eso de “año nuevo, vida nueva”, por esta razón se ha propuesto firmemente bajar de peso y cuidar su salud, y platicó en exclusiva con Publimetro del proceso que ya inició para cumplir su meta.
Han pasado 15 días de la cirugía, Beto, ¿cómo va tu recuperación?
— Gracias a Dios muy bien. Me operaron el día 16, estuve en recuperación el 17, y el 18 salí. Me sentía un poquito desesperado por la rehabilitación, primero empecé con una dieta de líquidos, luego papillas, básicamente pollo y pescado licuados y un poco de caldo para que no estuviera tan espeso. Y ya a partir de este viernes empiezo a comer más o menos normal, pero tiene que ser comida muy suave y debo masticarla muy bien.
Tu decisión de operarte fue muy repentina. Sabemos que el día 14 lo dijiste, el 15 te hiciste estudios previos y el 16 ya estabas en el quirófano. ¿Qué te motivó a hacerlo así?, ¿tenías ya problemas por el sobrepreso?
— Fue un poquito por mi rodilla derecha, que es en la que me recargo cuando estoy en los escenarios, me empezó a dar dolor. Y lo desordenado de mi alimentación, presentía que pudiera tener alguna enfermedad como alta presión o diabetes. Pero me hice los estudios de todo y el doctor me dijo que estaba muy bien. Entonces consideré que era el momento crucial. Dije: tengo 40 años, me voy a operar para tratar que lo que me resta de vida, vivirlo al máximo.
Entraste al quirófano con 133 kilos. ¿Tienes alguna meta de llegar a un peso determinado?
— Durante un tiempo, hace algunos años, me mantuve en 100 o 105 kilos y me sentía muy bien. Ahora el doctor me dijo que puedo llegar al peso que yo quiera, a los 90, o incluso a los 80 kilos, que sería lo ideal. Pero entre los 90 y los 100 kilos creo que estaría perfecto.
¿Y qué te dicen los doctores? Si sigues las indicaciones ¿en cuánto tiempo podrías llegar a ese peso?
— Pues si estamos hablando de llegar a 100 kilos, yo creo que de aquí a seis meses, claro, siempre y cuando lleve la disciplina correcta.
Has bajado 11 kilos en 15 días, ¿no es muy rápido?
— Sí, es muy rápido. Lo que pasa es que los primeros días es un tazoncito de caldo, una gelatina, y todo muy despacito, pero ha valido la pena.
Sé sincero Beto, ¿qué es lo que más vas a extrañar de tu antigua alimentación?
— Fíjate que, afortunadamente, puedes comer de todo. Ahorita voy llegando de comer con mis papás, fuimos a un restaurante de mariscos. Pedí un caldito de pescado, traía zanahoria, traía papa, y me lo fui comiendo, como te digo, muy despacito. Y luego me comí una tostada con atún y tantito aguacate, entonces comí normal.
Con el tiempo puedes comer de todo, carne de puerco, de res, pescado, pollo, camarones, todo. Solamente que hay que comer muy despacio y muy bien masticado, esa es la clave para que no te den ganas de devolver o que te caiga pesado.
Entonces, fuera de la rodilla que te daba problemas, esta operación es más que nada por salud, para estar y sentirte bien.
— Así es, para tratar de cuidarnos un poco. Después de los 40 años empiezan los achaques y siempre había sido muy desordenado para comer. Así que ahorita que estamos sanos, hay que evitar caer en enfermedades.
Este viernes 1 de febrero regresas oficialmente a los escenarios ¿verdad?
— ¡Sí!, hoy tocaremos en Albuquerque, Nuevo México. Estaremos viernes y sábado y regresamos el domingo. Mandamos hacer un pedestal para el acordeón, porque una de las incisiones que me hicieron queda exactamente donde va la correa del acordeón, y en cada movimiento me está tallando la correa. El doctor me dijo también que me pusiera una faja.
En sus palabras — “Después de la cirugía, tenemos que conocernos de nuevo mi estómago y yo”. Beto Zapata, vocalista de Pesado