El polifacético intérprete está acostumbrado a recorrer el globo terráqueo por su profesión pero eso no le ha supuesto nunca un problema ya que cuando era pequeño, su familia solía mudarse muy a menudo.
“Soy muy enigmático y un poco vagabundo porque me encuentro siempre de rodaje, viajando aquí y allá. Lo más extraño es que, como me mudé tantas veces cuando era pequeño, la idea de hacer la maleta e irme me trae buenos recuerdos. Es esa sensación de recoger tus cosas, hacer tu macuto y dirigirte a otro sitio la que me gusta. Así que para mí, el hogar está en la carretera”, explicó el actor en el programa ‘Daybreak’ del canal británico ITV.
Sin embargo, cuando no se encuentra en pleno rodaje, Johnny Depp vuelve a su casa de Los Ángeles, lugar donde reside junto a sus hijos –Lily-Rose (14) y John (11)– y donde estos tienen su centro escolar.
“Mi hogar en estos momentos podría decir que está en Los Ángeles porque es donde mis hijos tienen su colegio. Ahora que no me encuentro rodando, sí, puedo decir que Los Ángeles es mi hogar”, admitió.
Son precisamente sus hijos los que han ayudado a que Los Ángeles se convierta en un lugar que el intérprete pueda considerar su hogar, sobre todo a raíz de su separación de Vanessa Paradis en junio de 2012, una complicada situación que, por paradójico que parezca, fortaleció la relación entre Johnny y sus hijos.
“Una cosa así es difícil de afrontar para cualquiera, sobre todo cuando hay adolescentes involucrados. Aun así, creo que todo ha ido de la mejor forma posible. Ha sido interesante ver cómo esta experiencia ha intensificado el vínculo que tenía con mis hijos, me imagino que sucedió porque todos hemos atravesado juntos por ello. Sí, ha sido una experiencia que de alguna forma rara, nos ha unido más”, se sinceró.