0 of 11
«La Huérfana», de 2009, contaba la historia de la perturbadora niña «Esther», que terminaba haciendo cosas realmente macabras:
Pero en realidad, descubría un horrible secreto:
En sí, la historia es mucho más aterradora y sucedió en República Checa. Klara y Katerina Mauerova eran dos hermanas esquizofrénicas que vivían juntas junto con los hijos de la primera. Conocieron a Barbora Skrlová, de 33 años, que al padecer hipopituitarismo daba la apariencia de ser una niña de 13 años y que había engañado a una familia para que la adoptara antes.
Azuzó el carácter esquizofrénico de las hermanas. Las incitó a meterse a la secta «El Movimiento Grial», cuyo líder era «El Doctor», que se comunicaba con sus fieles por mensajes de texto por celular. Este permitía el abuso infantil, la antropofagia y otras aberraciones.
Las hermanas se volvieron radicales y Barbora, celosa de los dos niños, los acusaba de hacer cosas malas. Hasta que las convenció de meterlos en una jaula y torturarlos en el sótano. Eso fue en 2007.
Les ponían cigarrillos en sus extremidades, los quemaban y amordazaban, los azotaban con cinturones, intentaron ahogarlos. Los dejaron desnudos, durmiendo sobre sus propios excrementos y orina. Los bañaban con cubetadas de agua fría. Entonces Barbora decidió darles de comer abundantemente para practicar el canibalismo con ellos.
Barbora y las dos hermanas cortaban pedazos de los niños y se los comían. Para controlarlos, decidieron instalar cámaras de video. Un vecino que quería vigilar a su bebé captó su señal y entregó todo a la policía.
Barbora se hizo pasar por «Anika», de 12 años y huyó. Uno de los dos niños murió, otro testificó en el juicio. Las hermanas responsabilizaron a Barbora.
Ella ya estaba en Noruega y había sido adoptada por otra familia.
Fue extraditada a República Checa y juzgada junto con las otras dos victimarias. Las dos hermanas fueron condenadas a 12 años. Ella, solo a 5. Las tres apelaron sus sentencias.