Cada cierto tiempo, el mundo de la música pop y no tan pop necesita renovarse, necesita absorber un nuevo estilo de música y dejarse influenciar, más que una tendencia musical, las melodías van cambiando para adaptarse a las nuevas generaciones.
La década de los noventa inició con la búsqueda de algo nuevo. Uno de los fenómenos más interesantes de estos años fue la aparición de los discos “unplugged” en los que grandes artistas del pop/rock interpretaban su música sin instrumentos eléctricos.
«¿Qué hubo mi reina?, ¿cómo así que no se acuerda? Hicimos el amor, la pasamos bien y me va a decir que borró cassette…» Hace veinte años era inconcebible que un cantante mencionara tan explicitamente una relacion sexual en las canciones.
Antes se decían más cosas del tipo: «llamas y no quieres hablar, envias rosas y poemas de amor, y te siento siempre alrededor, ¿qué misterioso asunto ocultarás?, ¿por qué secretamente vienes y vas?, como lo dice Chayanne en su éxito de 1992, “Provócame”, cuya letra, cuenta también como lo hace Maluma, de una chica que conoce, le coquetea y al final no formaliza nada. Ambos casos, similares, suceden en décadas que ahora parecen años luz de distancia.
Sin embargo, en cuanto a grupos para adolescentes, el código parece seguir siendo el mismo, al fin y al cabo, las sensaciones de la adolescencia son las mismas, solo cambian las plataformas para explotarlas:
«Tus jeans eran algo tan detestable, no permitian iniciar la batalla, hechados en le hierba, me gustaba explorarte, hacia el sur, al sur…», así lo cantaba Magneto en 1992, y ahora en 2016, CD9, la boyband más exitosa del momento dice: «Desperte, otra vez, con la ausencia de tu voz, dibuje con mis manos tu silueta, amor… Si te llamo no contestas, si te busco nunca estás, nena dame otra oportunidad…»
Otro tema que en la generacion de los noventa era muy importante, era trabajar duro para superarse, como lo cantaba Calo en 1992, en su sencillo “Ponte atento”: «Ponte atento, no seas lento, los noventas es el momento, trabajar, superarse ya habrá tiempo para reventarse, despierta ya esa energía que en tu cuerpo tienes dormida…», ahora el género urbano está más enfocado en la playlist “Baila reggaeton” de Spotify con más de dos millones de seguidores, que reune las canciones más exitosas del género, un gran reflejo de las temáticas que funcionan hoy en día: las relaciones amorosas, en la mujer que lo enamora y lo rechaza y muy poca atención se presta al trabajo o la superación profesional.
Los ritmos repetitivos y letras pegajosas siguen siendo constantes en los hits; todos recordamos “ahí está el tiburón, se la llevo el tiburón, el tiburón…” que ahora 22 años después, suena a “me lo paro, el taxi, me lo paro, lo paro con una mano, lo paro que yo la vi, yo le pare el taxi, yo yo yo le pare el taxi…” con Osmani Garcia y el Midas de la musica latina, Pitbull.
Por muy cambiado que este el mundo, las letras y las historias serán las mismas, los sentimientos no cambian, simplemente la forma en que lo expresamos.
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