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Gracias al personaje de Sansa Stark en Game of Thrones, Sophie Turner es hoy una de las caras más reconocidas en la televisión y el cine.
Sin embargo, hace poco se supo que casi pierde el papel frente a una actriz que es idéntica a ella de nombre Izzy Meikle-Small.
Las dos actrices impresionantemente parecidas fueron las dos finalistas después de la ronda de audiciones para el personaje, pero al final, la producción terminó inclinándose por Sophie.
“Primero me dio tristeza porque la serie es un éxito pero ahora ya no estoy tan triste después de ver que siempre muestran demasiada carne, ¿no? No creo que a mis padres les hubiera gustado eso”.
Después de esas audiciones Izzy logró papeles dentro de las películas “Blancanieves y el cazador” así como “Never Let Me Go” así como la miniserie “Grandes esperanzas”.
Por su parte, Sophie Turner recientemente confesó a la revista “In Style” que la serie volvió muy difícil su etapa adolescente, “Cuando la gente empezó a reconocer mi nombre así como el del personaje, todo se volvió muy difícil. De mis 16 a 19 años, fueron años muy duros”, todo esto porque el personaje de Sansa Stark ponía siempre a prueba la paciencia de los fanáticos de la serie, “La gente odiaba a Sansa porque tenía 13 años y debería ser más inteligente y tomar buenas decisiones”, revela la actriz.
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