La exitosa telenovela Pasión de Gavilanes permitió a Danna García alcanzar un reconocimiento internacional avasallante en su carrera actoral. En piel de la querida ‘Norma Elizondo’, la colombiana se consagró y conquistó por completo a una masiva audiencia que a 17 años del estreno de esta historia aún la reconoce por esta interpretación.
Sin embargo, aunque sin duda esta producción es de las más importantes de su trayectoria, la actriz no guarda anécdotas entrañables de su paso por este melodrama y es que, además del difícil momento personal que estaba viviendo en esa época, se tuvo que enfrentar a un infierno en el set de filmación.
Sobre la realidad detrás de cámaras, muy distante a la imagen que el elenco proyectaba ante el público, Danna recientemente abrió su corazón y contó, como nunca antes lo había hecho, las duras experiencias que atravesó en las grabaciones de la novela de 2003.
Danna García sobre su paso en Pasión de Gavilanes: “Yo estaba muy sola”
El pasado mes de mayo en una transmisión en vivo a través de Instagram con su amiga Lorena Meritano, la actriz se sinceró sobre su experiencia en Pasión de Gavilanes, desde cómo entró a la producción hasta la hostilidad que sufrió en el plató.
La estrella, que tenía 25 años en aquella época, narró que apenas regresaba a Colombia tras pasar años trabajando en el exterior para protagonizar la novela con un papel que curiosamente obtuvo luego de que varias actrices extranjeras lo rechazaran.
A pesar de ser oriunda del país neogranadino, era difícil el rodaje pues no conocía a nadie en el equipo de trabajo a excepción de algunos técnicos. Además, en lo personal, la estaba pasando muy mal pues recién había terminado un compromiso sentimental y sus padres se estaban divorciando.
«Fue una época muy triste a nivel personal porque acaba de romper una relación, yo me iba a casar, regreso de Alemania a Miami, entré a la Universidad. Yo estaba en una época en donde lo último que yo estaba pensando era en ser actriz de novela o hacer algo exitoso«, afirmó Danna a la eterna ‘Dínora Rosales’ en el teledrama según recogió People En Español.
Lamentablemente, adicional al caos personal que atravesaba, en sus colegas en Pasión de Gavilanes no halló a esa familia que le hubiera gustado tener en aquel instante sino todo lo contrario.
«Yo estaba muy, muy sola«, enfatizó. «No encontré una familia en Gavilanes, que me hubiera hecho mucha falta, que hubiera necesitado, encontré un freno de mano”, confesó.
Posteriormente, cuando su personaje y el del actor Mario Cimarro comenzaron a resaltar como pareja principal, el ambiente se tensó pues esta situación no fue del agrado del reparto principal, a quienes se les había dicho que serían tres parejas y seis protagonistas.
“Nos habían vendido a todos como que éramos seis protagonistas y creo que ese fue parte del problema de que yo no encajara bien porque cuando empiezan los personajes de Mario y mío a ser como que en historia un poquito más protagonistas eso no cayó muy bien. No era culpa mía, pero terminas cargando el marrón, como dicen en España», agregó.
La protagonista de Bella calamidades develó que su participación en el proyecto también levantó el recelo de algunas compañeras que al parecer creían que ella buscaba «sobresalir».
«Tal vez mis compañeras no sabían que yo no tenía ningún interés profesional, o sea yo no estaba buscando ni triunfar, ni ser la reina de las novelas haciendo eso, ni sobresalir porque mi corazón estaba todavía en una transición entre lo que yo venía de vivir de mi vida personal, que era mi prioridad, entonces cuando yo entro a Gavilanes yo creo que estaba como muy inocente o ignorante de lo que estaba pasando porque mi cabeza estaba en otro lado», explicó.
De hecho, aseguró que debido a que estaba viviendo en una “desconexión”, intentando cumplir con el trabajo y solucionar sus problemas personales al mismo tiempo, no se dio cuenta de lo que ocurría alrededor de ella hasta mucho tiempo después de estar grabando.
«Como había esta desconexión entre la persona y la actriz, tampoco me daba mucho cuenta en un principio de cómo era el ambiente porque yo llegaba a grabar y estaba más preocupada como de aprenderme mis libretos y resolver mi estatus personal», aseveró.
Durante la plática, incluso sostuvo que había una persona dentro del equipo de Pasión de Gavilanes que se dedicó a poner a varios colegas en su contra.
“Cuando eres diferente y además hay alguien que se encarga de poner a los demás en contra tuya y yo me doy cuenta tarde, me doy cuenta a mitad de la novela(…). Yo la estaba pasando muy mal”, admitió. “Yo no quiero juzgar a nadie. Pero había una persona que ya era grandecita como para entender lo que estaba haciendo, de más de 40 años”, destapó.
No obstante, aclaró que además del respaldo incondicional de Lorena, quien se sumó más adelante a la novela, tuvo una linda amistad con Cimarro, quien encarnó a ‘Juan Reyes’, pues él también le brindó apoyo incondicional en ese momento.
«Yo le agradezco mucho a Mario, aparte del cariño que él tenía hacia mí, él era muy lindo conmigo y creó una amistad muy cercana conmigo”, concluyó la intérprete que si bien recuerda lo ocurrido en aquel trabajo como muy amargo, ya dejó todo atrás.