Aunque tiene más de dos décadas de una carrera artística marcada por el éxito, la admiración y el reconocimiento del público gracias a su impecable interpretación de incontables personajes en la televisión colombiana, Jorge Enrique Abello para siempre será recordado como el eterno ‘Armando Mendoza’, el neurótico galán de la telenovela más exitosa de todos los tiempos: Yo soy Betty, la fea.
El exitoso melodrama escrito por Fernando Gaitán lo consagró como histrión y le abrió las puertas de par en par para continuar escribiendo las páginas de su trayectoria; sin embargo, durante el “boom” de Betty, la fea, Abello no solo disfrutaba del mejor momento de su carrera por el enloquecedor éxito que le trajo el papel del presidente de Ecomoda, sino que también experimentaba unas dicha incontenible ante la pronta llegada de una las personas más importantes de su vida: su primogénita.
En el año 2002, meses después de transmitir el final del fenómeno de masas mundial, el histrión se estrenó en el rol más importante de su vida: el de padre. Y sin descuidar su trabajo como actor, se abocó al papel que le ha traído más satisfacciones y ha ejercido con inefable amor, madurez y carácter; no obstante, su hija ya creció y hace rato que dejó de ser esa bebita que lo convirtió en papá.
Conoce a Candelaria, la hija del eterno ‘Armando’ de Betty, la fea
Un 12 de febrero pero de hace casi 19 años, Jorge Enrique Abello debutó como padre junto a su entonces esposa, la periodista Marcela Salazar Jaramillo, de una niña a la que nombraron Candelaria Abello Salazar.
“Con Marce buscamos muchos nombres. Nosotros nos casamos el 7 de diciembre que es el día de la celebración de la candelaria. Y candelaria significa luz, candil. Entonces dijimos que en honor a eso, Candelaria”, dijo el actor sobre el nombre de su hija en una entrevista a la revista Zona Rosa en 2010.
Tristemente, la pareja se divorció tras casi una década de matrimonio en 2006, pero acordaron compartir la crianza de manera sana. Desde entonces, mantienen una excelente relación de amistad, apoyo y complicidad por el bienestar de su hija que hoy está convertida en toda una bella, talentosa e inteligente joven.
Aunque tras la separación de sus progenitores cuando tenía 4 años se quedó viviendo con su mamá, siempre estuvo fue muy cercana a su papá, con quien comparte muchos aspectos desde temprana edad.
“(Candelaria se parece a Jorge Enrique) en todo. Físicamente es exacta y en la forma de ser es también muy sensible. Tiene muchos intereses e inquietudes hacia el arte y también es incumplida como él. Es decir, se toma su tiempo y a veces se levanta de mal genio por las mañanas, sin razón como Jorge Enrique. Es de carácter, pero al mismo tiempo es muy dulce y tiene buenos sentimientos”, dijo Salazar hace casi 11 años al medio anteriormente citado, donde además elogió a su ex por su faceta como padre.
Actualmente, Candelaria tiene 18 años de edad y por lo que deja conocer en sus redes sociales, al parecer busca construir una carrera en el medio artístico detrás de escena y de manera independiente.
En su perfil personal en Instagram, donde acumula más de 20 mil seguidores, no solo exhibe en imágenes lo mucho que ha cambiado los últimos años, también comparte sobre sus aficiones, como pasar tiempo con sus amigos y viajar por el mundo.
De hecho, por lo expuesto en la mencionada plataforma, en el pasado ha visitado países como Francia, Suiza y diferentes ciudades de Colombia, donde todavía vive.
Por otro lado, tal y como lo señalaba su mamá, Candelaria desde siempre ha tenido una gran afinidad por el arte y hoy en día es una auténtica amante de la lectura y la fotografía.
En cuanto a su faceta profesional, esta aparentemente también se encuentra marcada por las pasiones que tiene desde niña pues estaba estudiando Artes Audiovisuales en 2019, según contó en la red social.
Igualmente, ha demostrado en varias postales en su perfil tener dotes de modelo con diferente posados en los que presume su belleza natural y auténtica personalidad.
La hija del eterno ‘don Armando’ de Betty, la fea además muestra que no le tiene miedo a los cambios y se ha expuesto con varios looks totalmente diferentes a lo largo de su vida. Y es que aunque nació con el cabello castaño oscuro hoy en día tiene su melena pintada de un azul vibrante, un color muy osado por el que se decantó tras llevar el cabello rubio platinado, el cual le sentó de las mil maravillas.
Si bien no se conocen muchos detalles más de Candelaria, los fanáticos de Jorge Enrique tiene sus ojos puestos sobre el camino que tomará en el medio la guapa jovencita que tiene una relación muy cercana con su famoso padre, de quien estaba súperorgullosa cuando era una niña, según contó su progenitora en una entrevista.
Y aunque el actor de 52 años no es asiduo de compartir fotos de su vida personal a través de sus redes sociales, las veces que ha expuesto a su primogénita destaca siempre ese gran lazo que tienen, demuestra que la ama con todo su corazón, la apoya en sus sueños y es feliz cuando se encuentra con ella.
De hecho, el año pasado, el galán consentido de Colombia escribió un hermoso manifiesto por el grado de su hija que leyó en un video compartido en Instagram.
Afortunadamente, Candelaria no solo se lleva bien con Jorge Enrique, también tiene una gran relación con la actual esposa de su padre, la modelo y arquitecta Marisabel Gutiérrez, y los hijos que ellos han procreado, Antonio Cayetano y María Matilde, sus hermanos de dos y un año respectivamente.
“Al ser papá estrenas el corazón de verdad. Te da el verdadero miedo, sientes la verdadera alegría, la verdadera tristeza. Sientes todo. Esa fragilidad te conmueve profundamente, porque tienes que velar y proteger muchísimo ese ser que es parte de ti”, destacó a Zona Rosa el protagonista de Betty, la fea, quien aprendió con su hija mayor mucho sobre la paternidad que ahora vuelve a experimentar desde sus primeras etapas con sus dos retoños menores.
