Durante el año 2008 se emitió con éxito por la pantalla chica mexicana Las tontas no van al cielo, una llamada “telenovela de vanguardia” protagonizada con maestría por Jacqueline Bracamontes, Jaime Camil y Valentino Lanús bajo la producción de Rosy Ocampo para Televisa.
La comedia romántica, transmitida por el entonces Canal de las Estrellas, acaparó por completo el gusto de la audiencia con las vivencias de la valiente ‘Cándida Morales’, una mujer que tras descubrir la infidelidad de su esposo con su hermana justo el día de su boda decide huir de todo y refugiarse en la casa de su tío, en su natal Guadalajara, a quien le pide informar falsamente a todos que falleció.
En esta ciudad mexicana, ‘Candy’ descubre que está embarazada de su expareja y da a luz al bebé de los dos, un niño a quien nombra Salvador pero que cariñosamente llama “Chava”. Al pasar los años en la historia, su hijo crece para convertirse en un simpático niño que amaba jugar fútbol con sus amiguitos.
A pesar de ser un infante, “Chava” juega un papel muy especial en la trama pues además de ser el “salvador” de su mamá en medio de tanto sufrimiento, protagoniza varios momentos importantes en la historia como cuando batalla contra la leucemia y la oposición que inicialmente tiene hacia la relación de su progenitora con ‘Santiago’, a quienes incluso intenta separar con el objetivo de unir nuevamente a sus papás hasta que finalmente acepta el idilio.
El enternecedor personaje fue encarnado por el entonces actor infantil Robin Vega, quien con apenas 6 años se robó el corazón de todos los espectadores con el talento y carisma que demostró con su interpretación; sin embargo, desde el estreno de esta ficción hasta su actual retransmisión por Tlnovelas han pasado 13 años en los que Vega dejó atrás la niñez para convertirse en todo un guapo joven que sigue construyendo su carrera en el mundo de la actuación.
El impresionante cambio de ‘Chava’, el hijo de Jacky Bracamontes en Las tontas no van al cielo
Luego de su destacada participación en Las tontas no van al cielo, la cual lo llevó a ser muy popular en esa época, Robin Vega continuó imparable desarrollando su incipiente trayectoria como actor. Y es que gracias al gran desempeño que obtuvo personificando a ‘Chava’ logró encadenar un proyecto tras otro en la pantalla chica mexicana, donde había debutado poco antes con una aparición en Una familia de diez.
El primer papel que se ganó tras brillar en la producción original de Ocampo fue en Mi pecado (2009), una telenovela protagonizada por Maite Perroni y Eugenio Siller, donde dio vida a la versión infantil de ‘Josué Huerta Aldama’, rol interpretado en su etapa adulta por Diego Amozurrutia.
Posteriormente, siguió indetenible encarnando a personajes infantiles en exitosas producciones para la pequeña pantalla como Corazón salvaje (2009), Plaza Sésamo (2009), Ni contigo ni sin ti (2011), y Abismo de pasión (2012). En esta producción de Angelli Nesma tuvo su última intervención en un melodrama en la piel del niño ‘Damián’, papel personificado en su adultez por David Zepeda.
Sin embargo, no representó su despedida de la TV pues después Robin prosiguió desplegando sus alas artísticas en la serie Nueva vida (2013), el teatro y los exitosos unitarios de Televisa Como dice el dicho y La rosa de Guadalupe, programa donde sí apareció por última vez en la pantalla interpretando a ‘Kike’, personaje del episodio “La vida se respira” (2018) ; señala Imdb.
Así luce hoy Robin Vega, el actor de ‘Chava’ en Las tontas no van al cielo
En la actualidad, poco queda del niño que dio vida a ‘Chava’ en Las tontas no van al cielo y es que Robin Vega está convertido en un auténtico galán de 20 años que continúa picando piedra en el mundo de la actuación y modelaje a la par de su formación universitaria.
Durante los últimos años, Vega además ha incursionado en las aguas de YouTube donde, aunque no ha sido constante con su canal, cuenta con más de 2500 suscriptores hasta la fecha a los que les ha compartido algunos aspectos personales en diferentes videos.
Por otro lado, también es todo un exitoso emprendedor que abrió una tienda virtual en marzo del año pasado en la que vende todo tipo de ropa, accesorios, calzado y otros artículos.
En su cuenta en Instagram, donde cuenta con más 45 mil seguidores, el joven da cuenta de todas sus facetas y, por supuesto, de su importante cambio físico y es que además del lógico “estirón” que se dio, Robin creció siendo un amante del deporte y el ejercicio, un hobbie que ha tenido resultados impresionantes en su aspecto.
De hecho, en la mencionada red social, no duda en presumir con orgullo su musculatura desarrollada y su cuerpo atlético y tonificado por el que continuamente recibe halagos.
Igualmente demuestra que pese a su profesión, es joven como cualquiera que disfruta pasar tiempo con sus amigos como la actriz Brigitte Bozzo, con quien compartió créditos en Abismo de pasión, y es un amante de los animales, especialmente los perros.
Asimismo, frecuentemente grita en esta red social su gran amor por su novia, la tiktoker e influencer Estefanía de la O, con quien tiene una relación desde hace algunos años y comparte su pasión por la vida fit y la administración de su negocio.
Hoy por hoy, Vega se dedica a disfrutar la vida mientras sigue en busca de una nueva oportunidad para volver a las telenovelas y reconquistar al público mexicano que todavía lo recuerda como el dulce e inolvidable ‘Salvador Molina Morales’ de Las tontas no van al cielo, un papel que él también guarda en sus memorias con mucho cariño.
“(Mi participación en Las tontas no van al cielo) fue una experiencia increíble, nunca fue un trabajo para mí ya que me divertí mucho, hice muchos amigos y aprendí mucho”, develó en 2019 a People En Español, revista a la que además le confesó que en el futuro se visualiza “terminando mi carrera, continuando con la actuación y teniendo una fundación para la protección animal”.
Actualmente, esta telenovela se está retransmitiendo de lunes a viernes a las 7:40 de la mañana y a las 5:30 p. m. por la señal de Tlnovelas.