En octubre de 1999, se estrenaba en Colombia la exitosísima telenovela Yo soy Betty, la fea, una historia escrita por Fernando Gaitán que no solo catapultó al estrellato a sus protagonistas, Ana María Orozco y Jorge Enrique Abello, también al resto de los miembros del elenco de lujo que los arroparon a lo largo del melodrama, como las actrices del inolvidable “Cuartel de las feas”.
Como recordaremos, dentro de la producción, la muy inteligente pero poco agraciada protagonista, ‘Beatriz Pinzón Solano’, pertenecía a este llamado “cuartel” que, además de acompañarla en cada aventura desde que entra a trabajar en Ecomoda, compartía con ella el hecho de no encajar dentro de los cánones de belleza imperantes.
Las actrices Dora Cadavid, Paula Peña, Luces Velásquez, María Eugenia Arboleda, Estefanía Gómez y Marcela Posada fueron las encargadas de interpretar a ‘Inés’, ‘Sofía’, ‘Bertha’, ‘Mariana’, ‘Aura María’ y ‘Sandra’, respectivamente, los personajes pertenecientes a este grupo de amigas que llenaron de vida la trama.
Gracias a sus interpretaciones en la novela, hasta la fecha reconocida como la más exitosa de todos los tiempos, la carrera del conjunto de histrionisas, que mezclaba estrellas de amplia trayectoria con otras incipientes luminarias, despuntó a nivel internacional y cada una logró continuar recorriendo una vida en el medio artístico durante los más de 20 años que han pasado desde el estreno de Betty, la fea.
Sin embargo, durante este tiempo, estas intérpretes no solo se han dedicado a sus carreras, también a ejercer el rol más importante de sus vidas: el de madres dedicadas a guiar a sus retoños en sus vidas, darles herramientas para su paso por el mundo y verlos crecer para ser personas felices, triunfadoras y de bien.
Ellos son los hijos de Betty, la fea y sus amigas
Aunque no todas actuaron como mamás en la obra maestra de Gaitán, en la vida real, todas sí han tenido la dicha de convertirse en madres. Algunas desde antes de Betty, la fea, otras después, pero sin importar la fecha o los desafíos, para cada una de ellas ha sido de las mejores experiencias de su existencia. A continuación, te presentamos a los retoños de las integrantes del “Cuartel de las feas”:
Ana María Orozco
La actriz de la memorable ‘Beatriz Pinzón Solano’ es una abnegada y feliz mamá de las adolescentes Lucrecia y Mía, productos de su matrimonio con el músico argentino Martín Quaglia, con quien contrajo nupcias en 2005.
La actriz se estrenó como mamá un año antes de su matrimonio, celebrado en Argentina, con el nacimiento de Lucrecia. Cinco años más tarde, nació su segundo retoñito. Lamentablemente, el amor entre ellos se acabó y terminó divorciándose de Martín en 2012, con quien mantiene una relación cordial.
Con su expareja, Orozco había migrado a Buenos Aires, donde se quedó radicada y dedicada completamente a la crianza de sus hijas. Después, retomó su carrera artística al sur de América del Sur, donde continúa establecida.
Debido a que es muy reservada sobre su vida personal, son pocas las veces que ha expuesto el rostro de sus más grandes amores.
Sobre ellas, ha dicho que son “muy argentinas”. Además, contó en una entrevista a Bravissimo que tienen una gran sensibilidad artística. “Son una mezcla de mamá y papá (…) tienen como una sensibilidad con el arte, con la música, con la pintura, pero más allá de que se vayan a dedicar a eso, han crecido a través del arte (…). Ha sido muy lindo eso, tiene mucha libertad en ese sentido”, dijo.
Luces Velásquez
En Yo soy Betty, la fea, Luces Velásquez encarnaba a ‘Bertha’, una mujer corpulenta, preocupada por su figura aunque incapaz de hacer dieta, que vive una vida aparentemente feliz casada con su marido. Dentro de la trama, esta mujer amante del chisme llega a tener una bebé que en más de una ocasión tuvo que llevar a las oficinas de Ecomoda.
Curiosamente, en la vida real, esa nenita que se robó el corazón de los espectadores con sus ojitos azules era su verdadera hija, Oriana, producto de su matrimonio con el cirujano plástico Jaime Lozada.
Antes de quedar encinta de su única hija, Velásquez había sufrido varias pérdidas y se había rendido con la idea de ser mamá. Por fortuna, quedó embarazada de esta niña a la que finalmente alumbró hace 20 años aproximadamente, durante las grabaciones de la ficción colombiana.
Tras conocer la noticia, a Fernando Gaitán se le ocurrió que el personaje se embarazara igualmente. Luego del nacimiento, le pidió incluir a la bebé en Betty, la fea y ella accedió, teniendo así Oriana su debut actoral en la telenovela más exitosa en la historia de la televisión colombiana sin ser consciente.
No obstante, su hija no heredó su amor por la actuación, sino la pasión por las ciencias de la salud de su papá y actualmente es una estudiante de Medicina que llena de orgullo a sus progenitores. De hecho, su mamá, a menudo la presume en su cuenta en Instagram, sus etapas de crecimiento, la belleza y mirada que le heredó, el inmensurable amor que le tiene y su fuerte lazo.
María Eugenia Arboleda
La actriz colombiana María Eugenia Arboleda, quien se inmortalizó en Betty, la fea encarnando a ‘Mariana’, la esotérica secretaria de ‘Marcela Valencia’ que hipnotizaba a todos cada vez que leía las cartas, es madre de un lindo pequeño llamado Santiago, el “amor de su vida” y fruto de su matrimonio con el ingeniero nuclear, Bob King.
En la actualidad, Arboleda vive felizmente junto a su esposo e hijo, quien cumplirá 10 años de edad el próximo 10 de marzo, en Atlanta, Estados Unidos, de donde es originario su marido.
Estefanía Gómez
Dentro de Betty, la fea, la rumbera ‘Aura María’, el papel que Estefanía Gómez encarnó con maestría, tiene un pequeño hijo llamado ‘Jimmy’. En la realidad, al igual que su personaje, Gómez debutó en la maternidad a temprana edad pero no de un niño sino de una niña a la que bautizó Gina.
Cuando apenas tenía 16 años, Gómez se convirtió en mamá de la pequeña, a quien crió con mucho esfuerzo mientras con buscaba una oportunidad en el mundo del espectáculo. Hoy, sus sacrificios han rendido sus frutos pues su hija ya no es más una niña sino una mujer de 27 años, con quien además de compartir un parecido impresionante, mantiene una cercana relación.
Gina es una mujer independiente que enorgullece a su madre con su trabajo. Estudió Administración de Empresas en Colombia y actuación en Nueva York, pero hoy por hoy se dedica a los negocios.
De acuerdo a lo señalado en su perfil en Instagram, es una exitosa empresaria detrás de dos emprendimientos: un negocio que ofrece obsequios con dulces y una tienda online de ropa deportiva.
Por otro lado, está agradecida con su madre no solo por el arduo trabajo que desempeñó para sacarla adelante, sino porque además la llevó a conocer al amor de su vida: el actor venezolano Giancarlo de Sousa, con quien su mamá compartió créditos en El final del paraíso.
Ambos se casaron en enero del año pasado en una íntima ceremonia en Estados Unidos, donde están radicados.
Marcela Posada
La actriz detrás de ‘Sandra Patiño, la secretaria más alta de Ecomoda, es madre en el plano real de una mujer llamada Nataly Arbeláez, quien le heredó su belleza y gusto por la actuación. De hecho, la joven estudió arte dramático en la Universidad El Bosque y hoy es una actriz que el público colombiano ha visto derrochar talento en producciones como Sala de urgencias.
Posada tiene un vínculo estrechísimo con su unigénita, fruto de un fallido romance, que demuestran con numerosas fotografías en redes sociales, donde los usuarios aseguran que parecen ser más hermanas que madre e hija.
En sus perfiles, Arbelaéz demuestra que además de actuar, tiene pasión por la danza, los viajes y presume su faceta como modelo.
Asimismo, no solo ha llenado de alegrías a su madre por ser la persona que es hoy en día, también por hacerla abuela de una tierna pequeña llamada Sara, que tiene 8 años de edad.
En 2019, la eterna ‘Sandra’ de Betty, la fea, recordó en una publicación en Instagram lo que fue ser madre soltera a sus 17 años: “Mi #Tbt de hoy me recuerda que el camino no es fácil, que las dificultades siempre estarán presentes. Éramos dos niñas enfrentando el mundo y hoy mirando atrás veo que Dios siempre ha estado a nuestro lado y que todo es posible cuando superas un día a la vez de la mano de quien todo lo puede».
Paula Peña
Por otro lado, la actriz detrás de la resentida ‘Sofía’, una mujer que sufre tras el abandono de su marido por una mujer más joven y se la pasa preocupada por los insuficientes ingresos para mantener a sus dos hijos, lleva años alejada de la actuación y radicada en Brasil con su única hija, Andrea Negret, con quien no solo tiene un lazo muy cercano, también un gran parecido
En sus redes sociales, que no actualiza con frecuencia, Paula no se ha dejado ver al lado de su unigénita, quien la llena de mucho orgullo. Empero, su hija sí ha divulgado algunas postales a su lado que dan cuenta de su bonita relación.
En entrevistas, Peña ha develado que su vástago es médico y ya tenía un tiempo viviendo en el país más grande de Sudamérica antes de decidir irse a vivir nuevamente con ella.
Dora Cadavid
Dora Cadavid se convirtió en mamá a comienzos de la década de los 60 con el nacimiento de su primer y único hijo, Moisés Cadavid. Desgraciadamente, la entrañable ‘Inesita’ de Betty, la fea sufrió la desgarradora pérdida de su unigénito en 2012, quien falleció tras una lucha contra el cáncer a los 52 años de edad.
En vida, Moisés siguió sus pasos y desempeñó como actor y director de televisión.
De acuerdo a medios colombianos, la actriz no volvió a ser la misma tras la muerte de su hijo, pero continuó trabajando por unos años más y vivió un tiempo con su nuera y su nieta; sin embargo, no quería ser una “carga para nadie”, por lo que buscó un hogar geriátrico, con ayuda de sus sobrinas, donde pasar a gusto el resto de su vida. Allí es donde vive desde entonces.
