La famosa actriz y cantante Thalía fue catapultada a la fama internacional gracias a sus papeles protagónicos en icónicas telenovelas de la década de los 90, y fue precisamente la trilogía de las Marías la que logró ayudarla a subir esos primeros escalones al éxito.
La trilogía de las Marías se basa en los tres papeles consecutivos que tuvo Thalía interpretando a sus personajes protagónicos de nombre María, comenzando con “María Mercedes” (1992), seguida de “Marimar” (1994) y finalizando con “María, la del barrio” (1995), todas siendo un rotundo éxito en Latinoamérica.
En cada telenovela encontraremos como mínimo a una villana que pretende hacerles la vida imposible a los protagonistas.
Es cierto que no siempre el bien le gana la batalla al mal, las crueles antagonistas de la trilogía pagaron todas sus macabras maldades.
La locura de Malvina en la trilogía de las Marías
Aunque la muerte es uno de los castigos más utilizados para las villanas de telenovelas, la malvada Malvina del Olmo, protagonizada por Laura Zapata, tuvo un final muy merecido después de todo lo que hizo sufrir a la protagonista, siendo un castigo verdaderamente peor que la muerte.
Luego de ver cómo su hijo la abandonaba por interponerse en el matrimonio que tenía con su amada María y saber que no vería ni un peso de la fortuna del fallecido Don Sebastián, Malvina enloquece totalmente.
Su salto a la locura se marcó al mirarse al espejo y tender que la protagonista le había ganado. A pesar de todos sus esfuerzos, perdió contra una chica de la calle.
Totalmente fuera de cordura, la desorientada villana se desviste de su elegante bata y procede a usar la desgastada ropa de María.
La villana ría de una manera esquizofrénica mientras corre a la calle para limpiar los parabrisas de los coches y pedir limosnas, tal y como María lo solía hacer.
Finalmente, Malvina termina en un manicomio, sus propios hijos la internaron luego de darse cuenta que su madre había perdido totalmente la razón.
Así acabó la historia para la malvada villana, quien alguna vez fue poderosa y adinerada, pero ahora gritaba: “Vendo billetes ¿quién me compra billetes?” en el centro psiquiátrico.
Trilogía de las Marías: Angélica, malvada hasta en su último respiro
Una de las escenas más impactantes y macabras de telenovelas fue protagonizada por Chantal Andere en el papel de la malvada Angélica Narváez, la villana que hizo hasta lo imposible por sacar de su camino a Marimar, pero que al final terminó pagando su crueldad de la peor manera posible.
Tras un aparatoso accidente de tránsito, Angélica quedó atrapada en la parte trasera del taxi donde se trasladaba, el cual quedó de cabeza luego de impactar contra un camión.
De un momento a otro, Angélica comenzó a arder en llamas luego de quedar cubierta por la gasolina que se derramaba sobre su cuerpo.
La villana logra salir del vehículos hecha una macabra antorcha humana y gritando agónicamente por ayuda hasta desmayarse en la carretera.
La siguiente escena, mostraba a Angélica en el pabellón de quemados del hospital, con su cuerpo totalmente quemado.
Con la piel en carne viva y agonizando, la villana admitió que fue ella quien quemó a los abuelos de Marimar y lo volvería a hacer sin dudas.
Sus últimas palabras fueron una orden para su esposo, quien estaba a su lado desconsolado.
“¡Quémala!”, gritó Angélica al referirse a la hacienda donde vivía Marimar, pues quería que ella también muriera en llamas.
Fue así como la villana dio su último respiro y falleció.
La villana más famosa de la trilogía de las Marías que debió morir dos veces
Sin lugar a dudas, una de las villanas más malvadas y recordadas en la historia de las telenovelas es Soraya Montenegro, interpretada por Itatí Cantoral.
Su papel de antagonista fue tan perfecto que murió en el capítulo 50 de la telenovela tras caer de un edificio e impactar contra el pavimento, pero la producción de “María, la del barrio” tuvo que reescribir el guión totalmente para revivirla semanas después, ya que los televidentes exigían ver a la que hizo famosa la frase “maldita lisiada”.
Finalmente, la muerte de la afamada villana llegó luego de atrapar a María en una cabaña para asesinarla, rociando a la protagonista con gasolina.
En un arranque de locura y desesperación al ver que la policía rodeaba el lugar, decide quemar la cabaña con ella dentro, pues prefería morir en llamas a ser encarcelada y su objetivo principal era acabar con María a cualquier costo.
El fuego se extendió rápidamente por sus piernas y vestido mientras gritaba agónicamente de dolor.
María logra escapar antes de ser alcanzada por el fuego, pero las fuertes imágenes mostraban cómo la cruel villana se quemaba totalmente y maldiciendo hasta su último momento.
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