Adrián Uribe se ha caracterizado por ser uno de los actores de comedia más talentosos y carismáticos de la televisión mexicana. Con su increíble sentido del humor, se ha quedado para siempre en la memoria del público gracias a su personaje de Vítor, que nació en La Hora Pico y se ha extendido hacia otros programas, como Nosotros los guapos.
Pero hace tres años vivió una situación trágica e inesperada, momento en el que pensó que iba a morirse. Durante una entrevista con Yordi Rosado, recordó ese oscuro momento de su vida en el que estuvo muy mal de salud. Comenzó contando que siempre ha sido una persona muy sana, hasta que un día en el dentista sintió un fuerte dolor en el estómago.
Adrián Uribe confesó el trágico momento en el que pensó que iba a morirse
El dentista que lo estaba atendiendo lo ve muy mal, por lo que le recomienda un doctor amigo suyo. «Voy al hospital, me hacen estudios y ven que tengo una malla (…) hace 15 años me operaron de una hernia umbilical, por las cargadas en Bailando por un sueño se me hizo una hernia y me pusieron una malla. Con el paso de los años, esa malla el cuerpo la rechaza y hace como una fibrosis y esa fibrosis envuelve el intestino hasta que llegó un momento que lo ocluyó (…) haz de cuenta que dejó de funcionar mi intestino, por eso el dolor», explica Uribe.
Entonces, lo operan de emergencia practicándole una laparoscopia: «Lo que hacen es que empiezan a despegar todo eso que se me había pegado al intestino (…) dos días después, temperatura, dolor, me hacen una tomografía y tenía peritonitis».
«En la misma semana me vuelven a operar por segunda vez, me abren, sacan el intestino (…) buscaron la abertura, me cosieron, vuelven a cerrar (…) a los tres días otra vez temperatura, otra peritonitis, otra perforación por otro lado del intestino».
Las numerosas operaciones a las que fue sometido
En dos semanas, Adrián Uribe fue sometido a tres operaciones. En esa tercera operación, le cortaron 30cm de intestino delgado para acabar con las perforaciones y salvar su vida: «Esa tercera operación en dos semanas hizo que estuviera 15 días en terapia intensiva, hubo una noche, fue para mí como un renacer (…) llevaba dos días de no dormir (…) del miedo, mi miedo era que no despertara por eso no me quería dormir, pensaba en su hijo, en que quería vivir».
«Ya yo me estaba despidiendo mentalmente de mi familia, pensé que me iba a morir. Esa noche hablé con Dios (…) me dijo Adrián no tengas miedo, aquí estoy, confía, no dejes de creer (…)», y fue desde ese momento en que el actor se tranquilizó y comenzó a mejorar de salud, salvando su vida.
Confesó que hoy en día ya no le tiene miedo a la muerte: «Le doy gracias a Dios porque cuando tienes una prueba tan dura en la vida, cuando estás al borde de la muerte (…) yo antes le tenía miedo a la muerte, ahorita ya no le tengo miedo. Se que es el siguiente paso, lo único que tenemos seguro en esta vida (…) más bien disfruto cada día, de verdad, porque no sabemos cuánto nos quede en este mundo».
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