Tras reconocer hace algunos días que el motivo de su desaparición durante más de dos meses se debió a que estuvo internado en un centro de rehabilitación y develar los motivos que lo llevaron hasta este lugar, el cantante Vicente Fernández Jr. se abrió sobre su estadía en la clínica y consideró esta experiencia como un secuestro.
Durante una reciente entrevista con la revista TVyNovelas, el intérprete La oveja negra develó que aunque efectivamente estuvo recluido en el mencionado centro, esto no se debió a que sufriera de alguna adicción como se especuló.
“Lo que viví fue una experiencia que no se la deseo a nadie (…). Sí estuve recluido, pero no por las razones que se dice y no tengo por qué regresar ni para qué regresar. Estuve en San Luis Potosí en la Clínica 13 de Febrero”, aseveró el hermano de Alejandro Fernández.
“Lo quiero dejar muy en claro: no soy apostador, no soy ludópata, no soy drogadicto, no soy alcohólico y nunca he robado a nadie, mucho menos a mis padres como lo andan diciendo por ahí”, señaló el artista que previamente declaró que entró al centro para comenzar una investigación para su campaña electoral, la cual tuvo que abandonar cuando esta situación se salió de su control.
Vicente Fernández Jr: «Era muy similar a estar en la cárcel»
Destacó que pasó días terribles internado en este lugar pues no solo estaba incomunicado, sino que además aseguró que el cuidado a los pacientes es deplorable.
“Fueron 66 días que no hubo comunicación con mi familia. Cuando estás incomunicado, duermes en una habitación con más compañeros y te cierran la puerta con candado por fuera con chapas especiales, era muy similar a estar en la cárcel. Por lo menos ahí tienes derecho a visitas obligatoriamente por semana, a llamadas, y aquí me bloquearon totalmente. Fue la institución la que me bloqueó”, apuntó.
La estrella de 57 años además aseguró que aceptó ingresar por su propio pie porque le dijeron que podría “entrar y salir a la hora que quisiera”. No obstante, una vez que estuvo dentro, ya no pudo salir.
“Resultó que aplicaron tanto el reglamento, que el tratamiento que llegan a tener las personas son de 90 días; yo tuve 66 porque hubo la oportunidad de que un paciente salió e informó a Mariana, ella se preocupó, preguntó por mí, y le dijeron que estaba intranquilo, molesto, y que el trato no era cordial ni respetuoso conforme a los derechos humanos que debe tener cualquier paciente. Se preocupó, informó a mis hijos, mis hijos informan a mis padres, e inmediatamente fueron por mí”, señaló.
Ahora que recobró su libertad, Vicente Fernández Jr. se asesora con el licenciado Guillermo Pous para emprender las acciones legales correspondientes. “Cualquier privacidad ilegal de la libertad es un secuestro”, sentenció desde su hogar en Guadalajara, Jalisco.
Por último, aseveró buscar que la verdad sea conocida. “(Quiero) que todo quede claro y que las cosas sean vistas y dichas como son, no como lo que inventaron”, finalizó.