Sin duda Silvia Pinal es una de las actrices mexicanas más exitosas en la industria cinematográfica. En la Época de Oro del cine mexicano, compartió créditos con importantes figuras como Elsa Aguirre, Gloria Martín, Joaquín Pardavé, Mario Moreno “Cantinflas”, Germán Valdés “Tin Tan” y Pedro Infante.
Silvia Pinal nació el 12 de septiembre de 1931 y gracias a su gran talento y belleza se convirtió en una de las actrices favoritas del director de cine español Luis Buñuel, quien en tres oportunidades le pidió ser protagonista de sus películas. Sin embargo, la diva del cine mexicano no tenía intenciones de dedicarse a la actuación.
Te recomendamos: ¿Qué dice la carta que el pintor Diego Rivera le escribió a Silvia Pinal?
El sueño de Silvia Pinal antes de ser actriz
A sus 92 años, Silvia Pinal es una de las mujeres más importantes y respetadas del medio artístico mexicano. Sin embargo, su sueño no estaba relacionado ni con el cine, ni con la televisión, ni con el teatro. Incluso, jamás pensó en alcanzar el nivel de fama del que actualmente disfruta.
En 1968, durante una entrevista con la periodista Josefina King, la actriz reveló cual era realmente su sueño. Aunque mencionó que llevaba el arte dentro de ella, no lo heredó de ninguno de sus dos padres. Por su parte, el papá de Silvia Pinal era ingeniero militar y su madre nunca manifestó interés por ninguna área artística.
“Quiero decir que creo haber nacido con esa inquietud, aunque nadie de mi familia pertenece al ambiente artístico”, añadió la conductora.
Aunque durante mucho tiempo sintió la incógnita, posteriormente se convenció que quería dedicarse a la música, específicamente a cantar ópera; algo totalmente diferente a su carrera artística. A los 14 años inició su formación en canto y aunque la maestra cumplía sus expectativas, al parecer no era recíproco. Silvia llegó a decir que a pesar de que su instructora era muy comprensiva, no estaba muy convencida con el talento de “La Pinal”.
También lee: Silvia Pinal agradece con lágrimas el reconocimiento a su carrera.
Así que, buscó otro profesor que fuese un poco más directo y sincero, quien la orientó a la actuación para eliminar la timidez que no le permitía desempeñarse como era necesario. Ese mismo profesor le recomendó tomar clases en Bellas Artes.
El consejo funcionó y posteriormente Silvia pudo soltarse de mejor manera. Durante el mismo camino se fue enamorando de la actuación y dejando a un lado la ópera. Silvia Pinal incursionó en la pantalla chica como actriz y conductora, enganchando miles de fanáticos en diferentes países de Latinoamérica.
Durante 21 años fue la presentadora de “Mujer, casos de la vida real”, uno de los programas más importantes de la televisión mexicana por su gran compromiso social, al retratar historias basadas en hechos reales que en su mayoría terminaban con una moraleja por parte de la conductora.
Su importante trayectoria como diva del cine mexicano también incluye su paso por el teatro, en donde participó como actriz y posteriormente como productora. Hoy, hablar de Silvia Pinal implica recordar sus incontables películas, programas y obras de teatro con los que marcó historia en la industria artística de México.
Aunque inicialmente la actuación no era algo que le quitara el sueño, el camino la fue formando para convertirse en una de las mejores de su país. Además, la artista se convirtió en fuente de inspiración para sus hijas, Sylvia Pasquel y la fallecida Viridiana Alatriste, quienes desarrollaron su carrera en las artes escénicas. Por su parte Alejandra Guzmán se dedicó a la música convirtiéndose en una de las cantantes más importantes de México.
Con información de Infobae.
