El próximo 1 y 2 de noviembre se celebrará en México y en diferentes partes del mundo a los muertos o como en la tradición religiosa se ha dado en llamar “Los Fieles Difuntos”.
La tradición católica y la prehispánica se conjugan para dar vida a una celebración muy colorida en nuestro país, en la que vivos y muertos conviven por tres días.
Aunque hay muchas formas de erigir un altar, los tradicionales son de siete pisos, que representa el número de pasos que el muerto debe dar para descansar.
El de tres pisos es funcional, porque no necesita de mucho espacio y tiene los elementos necesarios: En el primero, la foto o imágenes de los difuntos; segundo, alimentos, bebidas y dulces; tercero, flores, tierra, braceros, sal, y elementos para ayudar a descansar a los muertos.