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Aunque la Secretaría de Turismo de la Ciudad de México anunció que se espera la llegada de cinco millones de turistas a la capital, habrá otro cientos que experimenten este periodo vacacional en su oficina.
Antes de que comiences a bloquear a todos tus contactos en redes sociales por compartir imágenes o estados sobre su viaje de ensueño, ¿has pensado si tus emociones son naturales?
Ver a los demás de vacaciones llevan a cualquier individuo a sentir ego o frustración.
A decir de Óscar Galicia Castillo, doctor en Neurociencias y coordinador del área de procesos básicos de la Universidad Iberoamericana, este tipo de sensaciones no son nuevas, incluso son naturales. El experto explica el vínculo con la frustración.
“La frustración es el resultado de una comparación de lo que hacemos con lo que está ocurriendo en nuestras vidas o lo que podría ocurrir. Surge del hecho de pensar que existe alguien que tenga una mejor vida y que no podamos acceder a ella; esto genera a la larga un estrés crónico”, mencionó Óscar Galicia.
El ego también se presenta en este tipo de encrucijadas, en las que unos vacaciones y otros solamente son observadores.
Según Carlos Macías Vences, especialista en Desarrollo Humano, “El que vacaciona vuelve su viaje una situación de ego donde todo mundo trata mostrar su mejor cara, la que pareciera que es una vida ideal, perfecta; mientras que el que no sale de la oficina, recuerda que no está pasando por un buen momento, un comparativo terrible”
Los especialistas dicen que es bueno recordar que la vida real tiene mucho más matices, momentos en los que no podemos salir pero que no son permanentes.
“La felicidad no depende de hacer lo que uno quiere, sino de querer todo lo que haces”, dijo Óscar Galicia Castillo que también recomendó disfrutar este periodo en el que menos personas en las calles, disfrutar de todo, hasta de caminar- una virtud que pocas personas pueden hacer fácilmente- además, de recordar que el malestar individual no va a mejorar la situación.
Por su parte, Carlos Macías recomienda pensar que es una cuestión de apariencia; “si nuestro nivel de consciencia está en el ego, de mostrar que soy más que el otro, en lugar de compartir o estar mejor el prójimo, la situación de no salir de vacaciones nos afectará más. Hay que dejar de compararnos con los demás”, concluyó.
Redes sociales ¿amigas o enemigas en vacaciones?
Las redes sociales también influyen en la manera en la que los usuarios perciben las vacaciones, en este caso las de verano. Anita Valerio, Social Media Strategist detalla que el comportamiento online también se ve modificado.
“Una de las primeras cosas que hacen las personas al salir es activar la geolocalización en sus publicaciones. Es decir, los tweets que generan salen que están en «X» lado”; en Facebook, incluso pueden anunciar donde serán tus vacaciones pues comunica que estás a punto de volar a algún lugar increíble mientras los demás permanecen detrás de su escritorio (…) parecería que si no lo anuncias, no vale”, mencionó.
Además mencionó que hay muchas redes que permiten al vacacionista hacer check in en cada lugar que visiten (Swarm), encontrar recomendaciones o fotos similares (Instagram), incluso conocer personas que estén cerca (Tinder) esto genera un aumento en el uso de sus redes, que se refleja con los usuarios que forman parte de su comunidad.
“E n algunos casos, posterior a que las vacaciones terminan, se siguen subiendo fotos. Sobre todo si son lugares muy lejanos, exóticos y desconocidos hasta ese momento”, dijo la especialista.
Sí este periodo libre de los demás te provoca algún sentimiento poco tolerable, los especialistas sugieren administrar tu uso de las redes sociales, pues vas a encontrar una enorme cantidad de personas expresándose de diferentes maneras a través de lo que ellos son; además de poner énfasis en lo que podría estar sucediendo con tu percepción.
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