En estos tiempos en los que las redes sociales nos incitan a documentar el estilo de vida cotidiano, con elementos como la fotografía, será importante considerar mejorar las técnicas para lograr buenas imágenes.
Tomas de paisajes, naturaleza o incluso gastronomía invaden tus perfiles, ¿cómo sumarte a esta tendencia?
Luis Sandoval, el X-Photographer mexicano experto en fotografía de alimentos y platillos nos compartió algunos consejos para obtener una buena captura ¡a tu comida!
–Para lograr buenas fotografías de comida debemos cuidar su color con un correcto balance de blancos, ya que el exceso de tonos cálidos proveniente de la luz, puede darle un color extraño o irreal a los platillos. Una tonalidad fría o azul excesiva, también tendría un efecto poco favorable. Es cuestión de encontrar el equilibrio para poder captar un ambiente cálido y que la comida logre enamorar a la vista.
–Además de contar con buena luz ambiente en la escena, lo ideal es hacer uso de otra fuente de luz principal que se enfoque en la comida para resaltar las texturas y colores. La luz proveniente de un foco encima de la comida no es recomendable ya que puede hacer que luzca plana y sin vida. Si aún hay suficiente luz en el exterior podemos usar la luz que entre a través de una ventana o un flash externo rebotado hacia alguna pared o superficie blanca cercana a la comida para que la luz sea suave. La luz frontal dura no le favorece a la comida.
– Por lo general los utensilios que se colocan en la mesa también son característicos de la época y ayudan a transmitir el ambiente festivo de la temporada. Podemos usarlos como elementos de composición y darle contexto a la foto. Es importante tener un buen equilibrio entre la comida y estos elementos para que nuestro objeto principal no pierda protagonismo y que la foto no se sienta demasiado «cargada» de elementos.
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