Uno de los inventos que más han ayudado a la comodidad de las familias son las lavadoras.
No sólo evitan las manos lastimadas y la resequedad, sino los dolores de espalda por la incomoda posición al inclinar el cuerpo para tallar la ropa.
Lavar a mano requiere gran cantidad de tiempo y recursos: el proceso repetitivo de mojar, enjabonar, tallar, enjuagar, exprimir, sacudir y tender son tareas muy pesadas, por lo que siempre se justifica la inversión en uno de estos aparatos.
Lo que debes considerar
Hay de todo tipo de lavadoras, pero son cuatro los elementos principales que se deben considerar al adquirir una de estas máquinas: consumo de energía, consumo de agua (y afectación medioambiental), ruido y volumen de carga.
En la práctica se comercializan dos tipos de lavadoras: las de eje vertical y las de eje horizontal. Las primeras se caracterizan porque la ropa se introduce en el contenedor por la parte superior, mientras en las segundas su carga se realiza por la parte frontal. A su vez, pueden clasificarse en manuales, semiautomáticas y automáticas, siendo estas últimas en las que el usuario sólo tiene que programar los ciclos.
Las lavadoras son aparatos que gastan gran cantidad de energía eléctrica. Su consumo no sólo está en función del tipo de aparato, sino también de su capacidad de carga y otras características.
Las lavadoras automáticas, por la clase de funciones que realizan, consumen más energía que las manuales y las semiautomáticas. Por ejemplo, las manuales con agitador gastan entre 29 y 94 kilowatts/hora, cantidad menor que las semiautomáticas, que requieren para trabajar entre 34 y 144 kilowatts hora.
Todas las lavadoras que se comercializan en el país deben llevar una etiqueta amarilla de Eficiencia Energética. También se debe hacer una compra consciente respecto al gasto de agua que se tiene con los equipos.
“Parte de nuestra filosofía como empresa es que los electrodomésticos consuman poca agua y consuman poca luz, y esto lo logramos incorporando al motor de la lavadora la tecnología inverter. Esta tecnología puedes verla en nuestro refrigeradores y aires acondicionados, en donde tienes motores o compresores que trabajan con mucha potencia, y lo que esta tecnología te permite es no tener picos en el consumo de energía, que hacen que tus cuentas se vayan al cielo”, señaló Daniel Aguilar, director de comunicación de LG Electronics México, quien apuntó que la tecnología en las lavadoras deben migrar hacia ser amigables con el ambiente.
“Algo importante que nosotros tomamos en cuenta, pues representa nuestro ser en temas de lavadoras y electrodomésticos, es que buscamos hacer la vida mejor. (…) Nosotros fuimos la primera marca que inventó una lavadora doble, y a este sistema le llamamos Twin wash. Desde hace varios años nosotros sacamos un sistema que revolucionó el modelo de lavado tradicional y colocamos una lavadora que va arriba y otra pequeña que va abajo, para las pequeñas cargas de ropa que no pasan los 3.5 kilos, que puede ser ropa de bebé, ropa interior, peluches, entre otros”.
Recomendaciones sobre las lavadoras según la Procuraduría Federal
- Leer el manual del usuario antes de conectarla o utilizarla.
- Emplear el tipo y la cantidad de detergente recomendada por el fabricante. De no contar con esta información, usar productos bajos en espuma, pues en exceso hace que el motor trabaje más de lo necesario.
- Cargar el máximo de ropa permisible, de lo contrario se gastará energía y agua de más.
- Enjuagar los diferentes depósitos, así como el interior y el exterior del aparato, pues los residuos pueden dañar prematuramente los materiales.
- El uso de agua caliente degrada los resortes y las telas elásticas.
- Calcular la cantidad de ropa que se lavará regularmente y conocer qué capacidad te conviene más antes de adquirirla.
- Revisar la etiqueta amarilla de Eficiencia Energética y compararla con otras lavadoras.