La Confederación Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Futbol (Concacaf), quedó este jueves sin presidente luego del arresto de Alfredo Hawit en Zurich, Suiza, tras el escándalo de corrupción de la FIFA.
El cargo de titular del área quedaría en las manos de Justino Compeán, ex presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF) y actual vicepresidente de la Concacaf.
El reglamento de la Concacaf señala en el Artículo 32, dedicado para el Comité Ejecutivo, que “en caso de que quede vacante el puesto de Presidente, el vicepresidente con más años de servicio asumirá el cargo hasta la celebración del siguiente Congreso ordinario. En tal situación, el Congreso elegirá un nuevo Presidente para completar el mandato del Presidente anterior”.
El mexicano es vicepresidente de la Concacaf desde mayo del 2011, luego de que sustituyo a Guillermo Cañedo.
Su más cercano competidor por la presidencia sería Horace Burrell, un jamaiquino que llegó a la vicepresidencia de la confederación, sin embargo fue suspendido seis meses por participar en el escándalo de corrupción cuando Jack Warner fue destituido del cargo.
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