Al menos 50 empresas se han adherido al Plan Integral de Saneamiento de León para medir las descargas de agua contaminada y su saneamiento.
Estas empresas, de las 76 que se tiene como meta adherir en la primera etapa del proyecto, que tiene como finalidad el reúso de agua a través de su tratamiento, han invertido en promedio 400 mil pesos, según informó el presidente de la Cámara de la Industria de la Curtiduría (Cicur), Ricardo Muñoz Arrona.
“El gran obstáculo que tenemos es adherirnos al convenio y participar con Sapal en la medición de descargas para estar todos en igualdad de circunstancias. Implica inversión y costos y los tiempos están complicados para esto”, dijo.
Muñoz Arrona explicó que estas empresas representan alrededor del 70% de la producción de cuero en el municipio, aunque oficialmente se tienen registradas 600 tenerías en el municipio, 300 de ellas forman parte de la Cicur.
“Hay de todo tipo, empresas chicas que a lo mejor no van a invertir eso; peor aún así se tienen que adherir al convenio y pagar por lo que están descargando (…) estas empresas a las que se les invitó a esta primera etapa representan el 70% de la producción. Es muy representativo”, señaló.
El Plan Integral de Saneamiento de León fue presentando el pasado 22 de febrero por el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de León (Sapal). Con una inversión de 219.9 millones de pesos se dará rehabilitación a la red de alcantarillado y la modernización de sistemas para el pre tratamiento de aguas residuales para el Parque Piel, entre otras acciones.
En su primera etapa sólo incluyó a las empresas productoras de cuero, pero se busca incluir a todas las industrias para que sus aguas sean tratadas y puedan ser reutilizadas.
“Siento que tenemos que alinearnos todas las industrias, no sólo la curtidora, pero ya se está hablando de sumar a todos los sectores”, dijo Ricardo Muñoz Arrona.